Redacción / La Voz de Michoacán Ciudad de México. A través de una iniciativa de reforma, el presidente Andrés Manuel López Obrador busca que la Guardia Nacional pase a formar parte de la Secretaría de la Defensa Nacional, para que no suceda lo que ocurrió con la Policía Federal que se pudrió, se corrompió por estar al mando de un civil sin experiencia y sin convicciones. El mandatario nacional, durante su conferencia matutina, criticó a los opositores que, a su juicio, no quieren que se proteja al pueblo, y acusó que ellos protegen a delincuentes, “siempre los han protegido, tanto de cuello blanco como delincuencia organizada”. Fustigó que lo que quieren es que la GN dependa de la Secretaría de Seguridad Pública o de la Secretaría de Gobernación (Segob), para que un civil, como García Luna, la maneje, pues éste llegó a la SSP federal, a ser el brazo derecho de Felipe Calderón, sin ninguna experiencia y convicciones, pasando por el entonces CISEN, PGR y Policía Federal. Un ingeniero (García Luna) que lo que sabía era intervenir teléfonos, un político que acarreaba a periodistas a un especie de búnker que tenía, donde había cámaras y salían apantallados, y con una relación espléndida con los medios de información, hasta para hacer montajes”. El presidente mexicano consideró que es importante que la Guardia Nacional depende de la Sedena porque hay disciplina, profesionalismo y honestidad. La GN se requiere para defender y proteger al pueblo. ¿Qué quieren, un García Luna en la Guardia Nacional? No. Queremos que así como en la Sedena está una rama que es la Fuerza Aérea y otra que tiene que ver con el Ejército, ahí esté la Guardia Nacional, actuando con profesionalismo y respeto a los derechos humanos”. Al respecto, AMLO destacó que de la Guardia Nacional no ha recibido prácticamente acusaciones por exceso de violación a los derechos humanos. Nada que ver con lo que pasaba antes, porque reciben instrucción y porque hay la convicción de proteger al pueblo, porque el soldado es pueblo uniformado y se ha insistido mucho en eso, y tanto marinos como soldados están actuando con responsabilidad”. Insistió en que los errores que se han cometido y que han derivado en excesos por parte de la Marina y de la Sedena, han sido en lo fundamental por órdenes dadas por civiles del más alto nivel. Ejemplificó que en lo ocurrido en el 68 no fue por orden del secretario de Defensa, Marcelino García Barragán, sino del entonces presidente Gustavo Díaz Ordaz.