El Universal / La Voz de Michoacán Ciudad de México. El presidente Andrés Manuel López Obrador aseguró que gracias a su movimiento ya se creó una nueva corriente de pensamiento donde el corrupto es mal visto y estigmatizado con la frase: "fuchi caca". "Ya hay una nueva corriente de pensamiento y eso se debe a nuestro movimiento, porque antes ni en la academia, en las universidades, mucho menos en el parlamento, en los discursos políticos, no se mencionaba siquiera la palabra. Ahora es distinto, todos los días la estamos mencionando y no sólo eso, el corrupto está quedando mal visto, estigmatizado, fuchi caca", expresó el Presidente de la República. Durante su diálogo con el pueblo náhuatl de Milpa Alta, López Obrador también arremetió contra los médicos "corruptos" que se robaban el dinero para las medicinas. "Nos dejaron el sistema de salud por los suelos, centros de salud y hospitales sin médicos y sin medicinas, se robaban hasta el dinero de las medicinas, y no solo los políticos corruptos, también le entraban algunos médicos, una vergüenza que una profesión tan humanista se haya prestado a corromper el sistema de salud, afortunadamente la mayoría de los médicos tiene una concepción distinta, es gente honesta y sobre todo las 300 mil enfermeras y vamos a levantar el sistema de salud del país", puntualizó. Acompañado por la Jefa de Gobierno de la Ciudad de México, Claudia Sheinbaum, y el director del Instituto Nacional de los Pueblos Indígenas, Adelfo Regino, el Presidente y su comitiva fueron recibidos con una ceremonia tradicional de humo y copal. En el evento las autoridades indígenas pidieron a Dios que los cuide y proteja a los gobernantes. En su discurso, López Obrador aseguró que está trabajando con la mandataria capitalina de manera coordinada. "No menciono a Claudia Sheinbaum porque ella es nuestra hermana y yo estoy hablando por ella. Estamos tratando de manera coordinada y vamos a crear una universidad de lenguas indígenas", destacó. El Presidente también respaldó a la jefa de Gobierno en el sentido de que no se permita la construcción de desarrollos inmobiliarios o fraccionamientos en las alcaldías rurales de la capital. Recordó que más de la mitad del territorio de la Ciudad de México es rural y por ello se puede tener sustentabilidad de agua y oxígeno. "Por eso, por el bien de la ciudad, hay que proteger las áreas naturales de Milpa Alta, Tláhuac, Tlalpan y Xochimilco", enfatizó.