EFE / La Voz de Michoacán Ciudad de México. El presidente de México, Andrés Manuel López Obrador, insistió este jueves en su intención de reformar el Tribunal Electoral ante su “descomposición”, después de que la mayoría de magistrados se revelaran contra el presidente del organismo para sustituirlo. Hay una situación de crisis en el Tribunal Electoral, una descomposición, de ahí la necesidad de reformar tanto el INE (Instituto Nacional Electoral) como el Tribunal Electoral”. El miércoles, cinco de los siete magistrados del Tribunal se rebelaron contra su presidente, José Luis Vargas, investigado por corrupción, y acordaron destituirlo, algo que el funcionario depuesto no reconoció. López Obrador arremetió contra el nombramiento del nuevo presidente de la institución, el magistrado Reyes Rodríguez Mondragón, pues recordó que el año pasado lo insultó en Twitter mediante un mensaje que deseaba su muerte. “Resulta que el que eligieron en una ocasión me insultó. Lo comento para probar las características de estas personas”, criticó. El jefe del Estado opinó que todos los miembros de este tribunal “deberían renunciar por dignidad”, ya que la crisis interna es “un asunto lamentable, que da vergüenza”. Es una situación grave, la cual amerita una reforma constitucional para reformar los dos organismos, el INE y el Tribunal Electoral”. López Obrador, del Movimiento Regeneración Nacional (Morena), sostiene que hay que reformar los organismos electorales desde que en las elecciones intermedias del pasado junio lo amonestaron por hacer campaña y anularon a candidatos de su partido por irregularidades. El presidente arremetió contra las “contradicciones” de los fallos del organismo y señaló que los funcionarios electorales “ganan dos o tres veces” más que él. Durante la sesión del miércoles, cinco magistrados intentaron promover la destitución de Vargas, pero este denunció un “golpe de Estado” y suspendió el encuentro. Estos cinco miembros convocaron a una sesión paralela en la que nombraron a Reyes Rodríguez Mondragón nuevo presidente del Tribunal Electoral. La destitución de Vargas se produce mientras la Unidad de Investigación Financiera (UIF) lo investiga tras encontrarle gastos de 36,7 millones de pesos (más de 1.8 millones de dólares) de 2013 a la fecha pese a haber declarado en ese periodo un ingreso de 16,7 millones de pesos (835.000 dólares). El jurista llegó en 2016 a la Sala Superior del TEPJF nominado por el entonces presidente Enrique Peña Nieto (2012-2018) y en noviembre pasado se convirtió en presidente del Tribunal Electoral. La oposición ha acusado al magistrado de estar sesgado a favor del partido en el poder de turno, mientras que sus colegas han expresado descontento por su comportamiento errático.