La noche de este martes el fiscal del estado, Luis Carlos Nájera, reveló que la noche de lunes un grupo delictivo atentó contra la vida del comisionado de seguridad en la entidad, Alejandro Solorio Aréchiga, quien resultó ileso tras el ataque. Según Nájera, varios sicarios buscaron asesinar al funcionario como una venganza por la muerte de Heriberto Acevedo Cárdenas, jefe de una célula del cártel de Jalisco Nueva Generación abatido el 23 de marzo tras un enfrentamiento con elementos de la Fuerza Única de Jalisco en el municipio de Zacoalco de Torres; a este sujeto se le atribuyó el ataque a un convoy del Ejército, donde murieron cuatro soldados, en mayo del año pasado. El fiscal aseguró que tras la muerte de Acevedo Cárdenas, tanto él como varios de los mandos de la dependencia han recibido amenazas. Alrededor de las 23:00 horas de ese lunes, Solorio Aréchiga se dirigía al poblado Río Blanco, en Zapopan, cuando varios sujetos le cerraron el paso y comenzaron a dispararle; tanto el comisionado como sus escoltas, que viajaban en una camioneta blindada, repelieron la agresión y los atacantes decidieron escapar dejando abandonados tres vehículos. Se informó que el comando que atacó al funcionario disparó en al menos 100 ocasiones contra él utilizando rifles AR15, AK47 y un fusil antiaéreo calibre 50. El propio Solorio relató que logró ver que el comando que intentó emboscarlo tenía cargado un lanzamisiles que no utilizó. El fiscal Nájera señaló que se tiene la sospecha de que el Cártel de Jalisco Nueva Generación ha infiltrada a la dependencia, pues los atacantes sabían hacia dónde se dirigía el comisionado de seguridad cuando intentaron emboscarlo. "Estamos haciendo labores de inteligencia y tenemos una fotografía clara de quiénes componen esta estructura (...) este tipo de actos cobardes son una respuesta a las acciones que hemos venido realizando".
La Voz de Michoacán
