Agencias / La Voz de Michoacán La directora del albergue "Ejército de Salvación" en esta ciudad, María Victoria Ortiz Castillo, señaló que el problema de los niños de la calle en México no sólo crece de manera paulatina cada año, sino que ya es una situación tan grave que requiere de atención inmediata. En entrevista, Ortiz Castillo advirtió que de lo contrario habría una omisión que llevaría a transformar a esos menores en ejemplo a seguir o en los delincuentes del futuro. Los mayores índices de niños de la calle están en Baja California, Sinaloa y Chiapas, refirió. Aun cuando "Ejército de Salvación" tiene albergues en casi todas las regiones del país, el de Tapachula es único en su género porque atiende a niños de la calle en extrema pobreza y especiales. Ahí se atiende a 60 menores, a quienes no sólo se les da desayuno, comida y cena, sino también se le ofrece educación, atención médica y psicológica, así como la posibilidad de aprender un oficio y reintegrarse productivamente a la sociedad. Además, los lunes, miércoles y viernes, el personal de ese albergue recorre las calles en busca de menores que estén deambulando o trabajando como payasitos, vendedores de golosinas y lustradores de calzado. La mitad de los niños que se atienden en el albergue es de la calle y el resto son huérfanos o hijos de padres recluidos en penales, inmigrantes olvidados, otros que huyeron de sus casas y hasta aquellos utilizados para la prostitución y la explotación laboral. Ortiz Castillo refirió que los recorridos les permiten calcular que en esta ciudad hay alrededor de 300 niños de la calle. Además, que de los menores que atendidos en el albergue, la mitad ya ha consumido algún tipo de drogas y que 20 por ciento ya ha ejercido la prostitución, tanto hombres como mujeres. Asimismo, que uno de cada dos menores que han buscado ayuda en ese albergue es de origen centroamericano y el resto mexicano.
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