Con quemas y pintas protestan en CenSida entre denuncias de desabasto y negligencia

Redacción / La Voz de Michoacán

Ciudad de México. Como resultado del desabasto de medicamentos para tratar el sida, un colectivo realizó una protesta en las instalaciones del Centro Nacional para la Prevención y Control del VIH y el sida (CenSida). Entre incendios y grafitis, los manifestantes expresaron su indignación por el desinterés de las autoridades frente a la epidemia que existe en la actualidad.

La organización tiene como propósito entregar condones, realizar pruebas y proveer servicios para las personas que padecen esta enfermedad. Sin embargo, personas que asisten a este centro han denunciado la negligencia, la discriminación y el desabasto que hace que su salud se vea afectada.

Haarón Álvarez, periodista independiente, publicó mediante sus redes sociales escenas en las que se puede ver vidrios quebrados y muebles ardiendo como parte de la presión ejercida para que las autoridades gubernamentales surtan de medicamentos el centro y destituyan a la funcionaria correspondiente.

Con la consigna “CenSida no juegues con nuestra VIHda”, activistas exigieron su derecho a un sistema de salud digno. Alaín Pizón, defensor de los derechos humanos, denunció que la directora de la institución tiene un sueldo de 104 mil pesos al mes, mientras que realiza una labor deficiente atendiendo las necesidades de la población.

“Esto es resultado del acoso, de la persecución, de la falta de medicamentos retrovirales y de todo lo que ha hecho mal en este año esa señora y todo su equipo. Lo menos que se merece es la destitución, ni siquiera merece llegar al final de su mandato. No lo merece. Así como tampoco merece ganar 104 mil pesos al mes que sirven para nada a la epidemia”, expresó en el discurso que dio en la manifestación.

El VIH es una de las principales causas de mortalidad en el mundo y en el país, aun cuando existen métodos de prevención y tratamientos efectivos. Se trata de un virus que afecta a la población vulnerable, especialmente trabajadores sexuales y consumidores de drogas. Sin embargo, afecta a cualquier persona debido a que puede ser contagiado mediante el embarazo y la lactancia.

“Cada mes tenemos que estar enterrando e incinerando a nuestros compañeros de todos los estados de la República, ahí están los resultados de su mandato y de su gestión”, comentó el manifestante.