Redacción / La Voz de Michoacán Morelia, Michoacán. El coronavirus se ha propagado recientemente a un ritmo vertiginoso por el mundo, incluyendo América Latina y México no ha escapado a los contagios. No solamente porque todos los países de la región ya han reportado casos de COVID-19, la neumonía causada por el nuevo coronavirus que la Organización Mundial de la Salud describe como pandemia. La mayoría también reporta ejemplos de transmisión local, es decir que se han contagiado personas que no necesariamente salieron de su país de origen, lo que explica por qué en algunos el número de infectados con el coronavirus se duplica cada dos días. Haciendo que las autoridades expliquen y describan de qué manera se contagia el COVID-19 y ¿cómo se puede evitar? Como es por todos sabido los primeros casos de COVID-19 se registraron en China. Al tratarse de un nuevo virus, hay muchas incógnitas. Pero hay consenso en que se trata de una zoonosis, es decir, de una enfermedad que originalmente saltó de los animales a las personas. Todo indica que ocurrió originalmente en el mercado de mariscos de Wuhan, en China, donde también se comercializan animales salvajes. Sin embargo, lo que es preocupante es que se contagia de persona a persona y es algo que pasa con mucha facilidad. ¿Cómo se contagia? No solamente basta con coincidir con alguien infectado, ya que el nivel de cercanía, tipo de contacto, la duración del mismo y nuestros propios comportamientos son clave para el nivel de riesgo. La fortaleza de nuestro sistema inmunológico -a menudo condicionado por nuestra edad y estado de salud- también puede hacer la diferencia. El coronavirus puede infectar a gente de todas las edades, pero afecta con más fuerza a los ancianos. Foto: Twitter. La clave es entender que los virus que afectan al sistema respiratorio viajan sobre todo en las llamadas gotículas respiratorias, aquellas pequeñas gotitas que expulsamos al respirar, hablar, reír, toser o estornudar. Por eso el riesgo más alto de contagio se da cuando estamos en contacto cercano con una persona infectada, algo que el servicio de salud pública de Reino Unido, NHS, define como estar a menos de dos metros por 15 minutos. Esto significa que un enfermo con el que nos crucemos de forma fugaz en la calle se le haría muy difícil contagiarnos, aunque como toda precaución es poca lo mejor es evitar todo tipo de contactos. De manera que las gotitas virales que ese transeúnte puede haber dejado a su paso constituyen una potencial amenaza. Aún así, compartir vivienda con un enfermo de COVID-19 no es garantía de contagio, a pesar de que cuando estornudamos o nos tocamos la nariz o la boca podemos dejamos atrás gotitas con virus. Un estudio de los Centros para la Prevención de Enfermedades de Estados Unidos (CDC) sobre los primeros contagiados en ese país encontró que en esos casos la tasa de contagio era del 10%. Debido a que para infectarnos las gotículas respiratorias deben ingresar a nuestro cuerpo por los ojos, la nariz o la boca. Una posible forma de que esas gotículas lleguen a nuestro sistema respiratorio es a través de la tos y los estornudos de una persona infectada, que los expertos estiman son las principales formas de transmisión del coronavirus. Ya que los estornudos transforman las gotículas en aerosoles que pueden quedar suspendidos en el aire por varios minutos, antes de depositarse en las superficies cercanas. Toma medidas preventivas Las probabilidades de contagio son especialmente altas si nos estornudan o tosen a la cara.Pero una conversación a corta distancia con una persona infectada con el virus también es una posible forma de atrapar el virus. Una buena regla es que si podemos adivinar qué ha comido una persona por su aliento eso significa que lo estamos inhalando, y con el aliento también los virus que podría contener. Es la razón por la que las autoridades sanitarias de Estados Unidos están recomendando mantener una distancia de al menos 1,80 metros con nuestros interlocutores. Aunque para que ese consejo funcione también debemos seguir otros como tratar de no tocarse la cara y lavarse las manos constantemente y por al menos 20 segundos. Principalmente porque si bien los virus eventualmente mueren si no encuentran un organismo en el que reproducirse, hay un período de riesgo en el que lo podemos recoger de diferentes superficies. "Las manos están todo el tiempo tocando en superficies que pueden estar contaminadas y después la persona al tocarse la cara puede transmitirse el virus", explicó el subdirector de la Organización Panamericana de la Salud, Jarbas Barbosa. Por otra parte, los barandales de las escaleras mecánicas de una estación de metro son un ejemplo: el virus puede llegar ahí en forma de estornudo o por el contacto de la mano de un enfermo que se tapó la boca para toser. Y si después de tocarlas nos llevamos las manos a la cara, el daño muy probablemente está hecho. A menos de que nos hayamos lavado bien las manos antes, pues eso destruye al virus, que no es capaz de atravesar la piel. Una buena lavada de manos es la mejor solución para prevenir el contagio. Según una investigación publicada en The New England Journal of Medicine el SARS-CoV-2 puede sobrevivir hasta tres días en superficies de plástico o metal. El virus puede sobrevivir hasta tres días en superficies metálicas. Sin tomar en cuenta que la fortaleza del virus también va disminuyendo con el paso del tiempo. Y todavía hay poquísima evidencia de que la transmisión a través de superficies sea particularmente frecuente con el causante de covid-19. Aunque, si prefieres evitar riesgos, siempre puedes desinfectar los objetos potencialmente riesgosos con una toallita con alcohol empezando por el celular. Foto: Cortesía. El hallazgo más importante del estudio en The New England Journal of Medicine fue que el nuevo coronavirus "permanece viable" en el aire hasta por tres horas. Aunque un poco más tranquilizador es que su capacidad para permanecer en el aire es mucho menor que su viabilidad, pues solo se suspende en forma de aerosol hasta por media hora.