Estados Unidos. El gobernador del estado de Nueva York, Andrew Cuomo, dijo hoy que aunque las hospitalizaciones están bajando, 540 personas más perdieron la vida por COVID-19 en las últimas 24 horas y elevó el total a 13 mil 362 muertes. Agregó, en conferencia de prensa, que la mayoría de estas muertes se produjo en centros de salud y 36 de ellos, en asilos de ancianos, “esto aplasta el alma, si te sientes agobiado por el confinamiento piensa en lo que perdimos y lo que sigue en juego”. Cuomo pidió al gobierno federal apoyar a los laboratorios a conseguir más reactivos para realizar más pruebas y estimar una posible reapertura del estado. Apeló al nombre del país para recordar que todas las regiones deben estar unidas y no es momento de “tomar partido”, por lo que reiteró su invitación al presidente estadounidense, Donald Trump, para aumentar el financiamiento a su región y fomentar la coordinación. La víspera el demócrata y Trump discutieron sobre las pruebas de coronavirus a gran escala, con el gobernador argumentando que el gobierno federal debe intensificar; el ejecutivo le respondió que debería dejar de quejarse y comenzar a trabajar.