Redacción / La Voz de Michoacán Toluca, Estado de México. La pandemia de COVID-19 orilló a la familia Gazca Ojeda a abandonar su hogar y ahora los ocho integrantes viven en un camioneta en Toluca, Estado de México. La familia se dedica desde hace años a manipular juegos mecánicos y otras actividades en ferias; sin embargo, debido a la contingencia sanitaria se han quedado sin recursos económicos desde hace casi un año. “Por la pandemia, a nosotros los ferieros se nos cerraron todas las puertas, para nosotros no hubo ayudas”, exclamó Carlos Gazca, en entrevista para Telediario. Para obtener recursos, ahora los Gazca Ojeda han utilizado algo de su anterior trabajo para poder sobrevivir actualmente. “Ahora a lo que nos dedicamos es que las pocas alcancías que teníamos del tiempo que trabajamos en las ferias, las reconstruimos, las arreglamos para poderlas ofrecer y así la gente nos pueda ayudar con alimentos, despensa, ropa. “Vienen y nos la cambian, depende del tamaño de la alcancía es el tamaño que se les da”, explicó el señor Gazca. Relató que debido a que ya no pudo pagar la renta, se vio en la necesidad de adaptar su camión que anteriormente utilizaba igual para guardar juegos mecánicos que para vender hotcakes o incluso para juegos como lanzamiento de dardos a globos. “Es complicado tenerlos de estas formas”, reconoció el señor Gazca respecto a los cinco menores de edad y los tres adultos, incluido su esposa y suegro, que viven dentro de este vehículo ubicado a la altura de la Estatua de La Piedra y Las Torres, a unos diez minutos del centro de Toluca. “A veces pongo tantita leña para haga adentro un poquito de calor”, reviró sobre el clima frío en la capital mexiquense. El señor Carlos reveló que han vivido en estas condiciones desde octubre pasado y se han mantenido de las donaciones de la gente. “La gente nos ha ayudado mucho, y de antemano darles las gracias”, subrayó.