Dallas.- La búsqueda del dueño de un anillo de bodas que fue encontrado en el fondo del mar frente a una playa en México, y que se expandió en forma viral en Internet, llegó a su fin luego de ubicar al propietario. Unas 24 horas después de que periódicos y portales en México reprodujeran la acción emprendida a través de Facebook por el estadunidense Daniel Roark, para localizar al dueño del anillo, la noticia llegó al propietario de la argolla. Roark encontró el anillo en septiembre pasado cuando buceaba a unos 15 metros de profundidad frente a Playa del Carmen, en el caribeño estado mexicano de Quintana Roo. Al regresar de sus vacaciones decidió emprender a través de las redes sociales la búsqueda del dueño de la joya utilizando como única pista una inscripción que contenía en clave. Desde entonces más de 200 mil personas en unos 100 países alrededor del mundo compartieron a través de Facebook el mensaje de Roark de que había localizado el anillo y buscaba al propietario del mismo. Su esfuerzo atrajo la atención de celebridades de Hollywood y de varios medios de comunicación, incluyendo el periódico inglés Daily Mail. Sin embargo, no fue hasta el pasado viernes cuando la prensa mexicana informó sobre la extensa búsqueda, que los dueños del anillo se percataron de que había sido encontrado. Martín Castillo y Jessica Garza, una pareja residente de Nuevo Laredo, en el estado mexicano de Tamaulipas se enteraron así de que la argolla de matrimonio que él perdió durante su luna de miel el año pasado, había sido localizada. En entrevista con Notimex, Castillo dijo que pensó que “nunca” recuperaría el anillo que le fue bendecido en el altar y que su esposa Jessica, le colocó en su dedo el día de su boda, el 16 de febrero de 2013. Dijo que la mañana de éste sábado, una prima de su esposa que se entero de la búsqueda por la prensa mexicana, les informó y les envió el articulo, tras lo cual se pusieron en contacto con Roark. “Empezamos a llorar de emoción; ésto llegó en un momento donde por todo lo que esta pasando necesitábamos una señal de que todo va a mejorar”, indicó Castillo, quien este año dejó su trabajo para mudarse a Nuevo Laredo y acompañar a su padre enfermo, quien falleció hace dos meses. “Estamos más que felices. Daniel es una bendición para nosotros, quizás perdimos la fe un momento pero Dios nos mandó una señal enorme de que existe y esta aquí con nosotros, justo cuando más lo necesitamos, esto significa muchísimo para nosotros ya que es el símbolo de nuestro amor”, dijo Jessica. El anillo permaneció 18 meses bajo el mar y Castillo lo perdió el 21 de febrero de 2013, cinco días después de casarse, cuando buceaba durante su luna de miel. “Supe que se me había caído en el fondo del mar y quise volver a bajar para buscarlo, pero no me permitieron hacerlo sin pagar”, dijo. “Pasamos toda la tarde, esperando que alguno de buzos o de los turistas que bajaban lo encontraran, pero no, y salimos llorando de ahí”, expresó. Castillo dijo que junto a su esposa tardaron mucho tiempo en decidir que anillos comprarían para su boda, hasta que finalmente los compraron en una joyería de Monterrey, donde ordenaron que inscribieran en el anillo de Martín la leyenda: “JESSICA 16 02 13 TYYJCEM”. Roark utilizó esa leyenda como la única clave para dar con el dueño de la argolla, el nombre de la novia, la fecha de la boda las siglas TYYJCEM, una abreviatura de “Tú y yo juntos contra el mundo. El joven de 21 años, residente de la comunidad de Gloucester, Massachusetts, dijo que desea entregar personalmente el anillo a Castillo y a su esposa. La forma en que se devolverá el anillo aun esta en planes, pero podría ser en febrero próximo cuando Martín y Jessica cumplan dos años de matrimonio.