Redacción / La Voz de Michoacán Guadalajara. Ocho personas, 6 de ellas derechohabientes y 2 trabajadores, fueron rescatadas luego que el elevador del Hospital General Regional 46 del Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS) en Guadalajara, Jalisco, se descompuso esta tarde. El IMSS precisó que no hubo lesionados y todas las personas salieron ilesas, luego de haber quedado retenidas por un lapso de 10 minutos. https://twitter.com/Adela_Micha/status/1684764362131542016 Personal de mantenimiento del IMSS intervino para liberar a las personas antes de que los equipos de emergencia llegaran al nosocomio. "Cuando se suspendió la operación del elevador, personal del hospital activó protocolos de seguridad y se reportó a Protección Civil. A la par, las personas retenidas marcaron al 911 y forzaron la puerta para salir a través del plafón, ya que se había detenido en entre piso", indicó el IMSS. https://twitter.com/RealArturoH/status/1684732072470908928 La Dirección de Protección Civil y Bomberos de Guadalajara confirmó que ninguna de las personas que quedaron atrapadas, entre las que había adultos mayores, presentó lesiones por el percance. El elevador se atoró entre los pisos 9 y 10 del edificio. El IMSS informó que revelarían las causas a la brevedad. Los miembros de Protección Civil de Guadalajara clausuraron el elevador hasta confirmar que no existen riesgos para otros usuarios. Imágenes que circulan en redes muestran a las autoridades colocando las cintas para que no se use el elevador mientras se lleva a cabo la investigación. https://twitter.com/Tu_IMSS/status/1684773357680574464 Reforma aseguró que el 19 de julio, otro grupo de personas se quedó atrapado en un elevador de la misma clínica. En esa ocasión, lograron salir con sus propios esfuerzos. La última tragedia relacionada con los elevadores del IMSS ocurrió en Quintana Roo el 10 de julio, cuando una niña de 6 años de edad murió atrapada en el mecanismo de transporte. La compra de 181 elevadores que el IMSS realizó en mayo de 2016 por 558 millones de pesos estuvo plagada de irregularidades y éstas no fueron atendidas por su entonces director general, Mikel Arriola, señaló el propio Instituto.