Redacción / La Voz de Michoacán Celaya, Guanajuato. Juan Carlos Padilla, de 54 años, se dirigía al mercado de Celaya en compañía de su esposa y su hija, la tarde del lunes, cuando elementos de la Agencia de Investigación Criminal de Guanajuato le cerraron el paso porque supuestamente contaban con una orden de aprehensión contra él. Todo terminó en un forcejo y el sometimiento de Juan Carlos por parte de los agentes, quienes lo golpearon y lo habrían asfixiado hasta que murió. La Fiscalía General de Guanajuato informó que los agentes fueron detenidos y su actuar será investigado a fin de “esclarecer la mecánica de los hechos”. Fue en el cruce de las calles Felipe Ángeles y Jaime Nunó, del Barrio de la Resurrección, donde una camioneta RAM sin placas le cerró el paso a Juan Calos, quien desde hacía 28 años se dedicaba a la venta de tamales. De la unidad descendieron dos hombres y una mujer, quienes se identificaron como agentes ministeriales y le informaron a Juan Carlos que lo iban a detener, pero él se opuso y pidió que le mostraran la orden de aprehensión. Entonces comenzó el forcejo. Los agentes derribaron al hombre, quien desde el piso pedía ayuda, según se observa en un video que circula en redes sociales. Los oficiales lo sometieron violentamente, a golpes y colocándole una rodilla en el cuello, mientras el hombre gritaba pidiendo auxilio. Los ministeriales subieron a Juan Carlos a la unidad, en la cual después lo trasladaron al hospital, pero el hombre murió. La hija de la víctima comentó que desde que los oficiales se llevaron a su padre en la camioneta no volvieron a saber de él, por lo que acudieron a la Policía Municipal y a la Fiscalía Región C, pero no les dieron información. Entonces se enteraron que su familiar había sido llevado, golpeado y ensangrentado, al Hospital General de la ciudad, a bordo de una camioneta que coincidía con la unidad en la que los agentes se lo habían llevado. Ahí murió Juan Carlos. Perdió la vida en el área de shock del hospital. La última vez que su familia lo vio vivo fue cuando se lo llevaron los ministeriales y horas después se enteraron de su deceso, por lo que responsabilizan a los agentes de su deceso. El fiscal general de Guanajuato, Carlos Zamarripa, confirmó el incidente y aseguró que la orden de aprehensión en su contra se cumplimentó “bajo condiciones de oposición de un tumulto”. “El inculpado perdió la vida. Los agentes han sido detenidos y su actuar será investigado a fin de esclarecer la mecánica de los hechos”, escribió en su cuenta de Twitter. Derivado de los hechos, la Procuraduría de los Derechos Humanos del Estado de Guanajuato inició de oficio el expediente de queja 103/2020-CI y solicitó informe al director general de Investigaciones de la Fiscalía del Estado, así como al director del Hospital General de Celaya.