Redacción / La Voz de Michoacán Chiapas – Edgar "N", presunto responsable del asesinato del sacerdote Marcelo Pérez Pérez, fue vinculado a proceso tras ser capturado un día después de su identificación como autor del crimen ocurrido el pasado 20 de octubre en esta ciudad. En una audiencia realizada este miércoles, el juez de control determinó que Edgar "N" enfrentará cargos por homicidio calificado, basándose en los elementos presentados por la Fiscalía General del Estado de Chiapas. Además, se le impuso la medida cautelar de prisión preventiva, lo que significa que permanecerá encarcelado durante los tres meses que durará la investigación complementaria. El asesinato del padre Marcelo conmocionó a la comunidad local, por la labor del sacerdote como defensor de derechos humanos. La fiscalía general de Chiapas informó que sigue investigando el caso y que, según los primeros reportes, podría haber más personas implicadas. Marcelo Pérez fue atacado a balazos cuando se encontraba en su camioneta, tras oficiar una misa en el barrio Cuxtitalli. El sacerdote fue sorprendido por un hombre armado que se acercó a la ventana del conductor y le disparó en repetidas ocasiones, causándole la muerte. Testigos del hecho y el análisis de las cámaras de seguridad del C5 fueron fundamentales para la detención del sospechoso. En su momento la Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH) condenó el homicidio y exigió al Estado una investigación exhaustiva que sancione a los responsables intelectuales y materiales del crimen. La CIDH recordó que el sacerdote indígena era beneficiario de medidas cautelares desde 2015 debido a las amenazas que había recibido por su labor en defensa de los derechos humanos y por denunciar actividades del crimen organizado en la región. La labor de Marcelo Pérez, como párroco y defensor de derechos humanos, lo había colocado en una situación de vulnerabilidad en una región donde la violencia ha aumentado en los últimos años. La CIDH hizo hincapié en que los ataques contra defensores no solo ponen en riesgo su vida, sino también la de las comunidades a las que protegen, aumentando su exposición y dejándolas en un estado de indefensión. La iglesia local ha convocado a marchas pacíficas para exigir justicia y recordar la memoria del sacerdote. La fiscalía general del Estado continuará recabando pruebas y testimonios para fortalecer la acusación, mientras la defensa del detenido prepara su estrategia legal. Aunque el proceso aún se encuentra en una etapa temprana, la sociedad chiapaneca espera que este juicio arroje luz sobre el asesinato y que se haga justicia en memoria del padre Marcelo Pérez Pérez.