Redacción / La Voz de Michoacán Morelia, Michoacán. La madrugada del viernes 5 de julio de 2024 el huracán Beryl tocará tierra en Quintana Roo, generando preocupación entre sus habitantes; inicialmente fue registrado como categoría 5, pero bajó su intensidad y se pronostica que llegue a suelo quintanarroense como categoría 3. Los gobiernos de Quintana Roo y Yucatán activaron sus defensas al máximo, iniciando protocolos de seguridad para estos casos, ya marcados por huracanes anteriores. Por eso te presentamos un recuento de los fenómenos de esta naturaleza que han sido más destructivos en la historia mexicana. Wilma, 2005 En 2005, el huracán Wilma, considerado el más destructivo en la historia de México, causó estragos significativos, especialmente en la zona turística de Cancún. Según la Asociación Mexicana de Instituciones de Seguros (AMIS), Wilma provocó daños cubiertos por la industria de seguros por un total de 2 mil 714 millones de dólares. Además de daños materiales, Wilma cobró la vida de al menos ocho personas: 2 en Playa del Carmen, 4 en Cozumel, uno en Cancún y otro en Yucatán. Wilma tocó tierra en más de una ocasión, provocando efectos más destructivos en la península de Yucatán, sin mencionar los daños provocados en Cuba y en la parte sur de la península de Florida, Estados Unidos. Otis, 2023 En octubre de 2023, el huracán Otis tocó tierra en Acapulco, Guerrero, convirtiéndose en el segundo huracán más costoso en la historia de México, al ser categoría 5. Hasta el 31 de mayo de 2024, la industria aseguradora ha cubierto hasta 38 mil 451 millones de pesos por los daños ocasionados por Otis, fenómeno que resultó en al menos 47 decesos y 59 personas desaparecidas. Isidoro, 2002 En 2002 el huracán Isidoro, tocó tierra en Yucatán como categoría 3, causando daños por un total de 425 millones de dólares, informó en su momento AMIS. Este huracán destruyó la economía local, especialmente del sector agropecuario, aseveró un comunicado realizado por el gobierno de Yucatán sobre los daños; se reportaron pérdidas estimadas en mil 600 millones de pesos y destrucción del 70 por ciento de superficie cultivada. Gilbert, 1988 Otro huracán notable en la península de Yucatán fue Gilbert, en 1988, causando la muerte de 225 personas, además de daños en la infraestructura y los servicios urbanos. Fue el más intenso en la cuenca del Atlántico hasta 2005 y dejó un costo económico de 166 millones de dólares. A pesar de que no se espera que el huracán Beryl cause daños tan severos como los mencionados, su llegada en categoría 3 representa un riesgo significativo para la población, por lo que a la población del sureste se les recomienda mantenerse informada a través de canales oficiales, seguir instrucciones de las autoridades de Protección Civil, tener un plan de emergencia y suministros básicos a la mano y evitar salir de casa durante el paso del huracán.