Notimex/La Voz de Michoacán Ciudad de México. La presidenta del PRI, Claudia Ruiz Massieu, advirtió que cuando entre en funciones el nuevo gobierno los priistas se articularán en un gran frente opositor y aclaró que no bloquearán los proyectos que convengan al país pero rechazarán lo que comprometa la estabilidad, al tiempo que reconoció que el partido necesita "una reforma de forma y fondo". El gran bloque priista debe operar igual que un banco de peces. Como un solo cuerpo compuesto de muchos integrantes, que trabaja en perfecta sincronía, en el mismo sentido, con el mismo ritmo y hacia el mismo objetivo”, subrayó luego de rendir protesta como presidenta del tricolor. En el Auditorio "Plutarco Elías Calles" de la sede priísta, dijo que en el Poder Legislativo serán oposición firme, crítica, valiente y vigilante que los mexicanos necesitan. “Seremos un verdadero contrapeso, que le hable de frente al Gobierno Federal: con argumentos, con ideas y con principios”. Me comprometo a ser una Presidenta receptiva, que trabaje desde el diálogo abierto, no desde los despachos cerrados, con todos los sectores, organizaciones y expresiones del partido. pic.twitter.com/M8CQZYtfx7 — Claudia Ruiz Massieu (@ruizmassieu) 22 de agosto de 2018 Afirmó que estarán atentos a que el gobierno use el poder que se le acaba de otorgar para servir, para beneficiar al pueblo, no a sus incondicionales. "Para tomar decisiones con visión de Estado, no con intención electoral". Indicó que serán una oposición constructiva pero no permisiva. "No bloquearemos los proyectos que le convengan al país, porque para el PRI primero está México". Llamó a los priistas a cerrar filas para reformar al partido y fortalecerlo. "Cerremos filas para defender a nuestro partido. Cerremos filas para servirle a la gente y para encarar el futuro. Juntos y en unidad lo vamos a lograr". Cerremos filas para defender a nuestro partido, para defender a nuestra casa. Cerremos filas para servirle a la gente y para encarar el futuro. ¡Juntos y en unidad, lo vamos a lograr! — Claudia Ruiz Massieu (@ruizmassieu) 22 de agosto de 2018 Hizo una autocrítica al partido y admitió que "nos olvidamos de nuestros orígenes cuando abandonamos la acción política de base, privilegiamos el pragmatismo sobre nuestros principios, nos dejamos seducir por el poder". Dejamos que los cínicos y abusivos mancharan la imagen y lastimaran la reputación de los millones de mujeres y hombres honrados, patriotas y trabajadores del PRI, los militantes que tocan las puertas y piden el voto por nosotros; los servidores públicos que trabajan incansablemente por México; los liderazgos sociales que son la cara del partido en cada rincón del país", refirió. En su mensaje convocó a encauzar la energía de la militancia para reformar al PRI, subrayando que no hay que confundir cambio con ruptura. Para renovar al @PRI_Nacional, igual de importante que tomar decisiones, es no eludir responsabilidades. El deber primordial de una nueva dirigencia es hablar de frente, hablar claro y hablar con la verdad. — Claudia Ruiz Massieu (@ruizmassieu) 22 de agosto de 2018 Concluyamos el periodo de reflexión y diagnóstico en el que estamos. Que sus resultados sean el punto de partida del proceso deliberativo, incluyente, abierto, donde participen todas las voces, las expresiones y opiniones de nuestro partido", subrayó. Sostuvo que "necesitamos una reforma de forma y de fondo, donde estemos dispuestos a poner todo sobre la mesa, tanto lo que queremos conservar como lo que necesitamos cambiar". Lo que la ciudadanía evaluará en las próximas elecciones no es lo que hagamos adentro, sino lo que hagamos afuera, nuestros resultados y honestidad donde seamos gobierno, nuestra congruencia y valentía donde seamos oposición, nuestras conductas y actitudes personales como priistas", agregó. Juntos, añadió, se irán definiendo tiempos, método y acciones. "Mi responsabilidad es conducir, durante un año, este esfuerzo que nos llevará a definir la reforma que queremos. La tarea de ejecutar esta reforma será responsabilidad de la dirigencia que elijamos dentro de un año". En este marco, anunció que en un plazo no mayor a 60 días convocará a la elección de un Secretario General que surja de las filas del PRI, para que complete y fortalezca al Comité Ejecutivo Nacional.