La Iglesia debe denunciar toda violación contra los niños nacidos y no nacidos, así como defenderlos al luchar contra la cultura de la muerte, aseveró el arzobispo primado de México, Norberto Rivera Carrera. El cardenal reflexionó en su homilía dominical sobre los derechos de los niños, enfatizó que la Iglesia debe ejercer su ministerio al denunciar toda violación contra los menores, pues apuntó que los niños están indefensos ante la "exaltación de la violencia, el erotismo y el materialismo de la sociedad de consumo". "El niño concebido, no nacido es el ser más pobre vulnerable e indefenso que hay que defender y tutelar, la Iglesia debe ejercer el ministerio profético denunciando toda violación contra los niños nacidos y no nacidos", expresó el prelado. Resaltó que a pesar de los avances en materia de protección a la niñez como la Declaración Universal de los Derechos de los niños, este instrumento se queda muchas veces "en el papel", pues comentó que hay un "panorama sombrío" de la sociedad frente a la infancia. "Incluso se presenta un aberrante comercio de niñas y niños, tráfico de órganos y hasta de niños utilizados para cultos satánicos, niños explotados laboralmente en condiciones infrahumanas niños víctimas del despliegue masivo de iniciación s las drogas, niños indefensos ante la exaltación de la violencia, el erotismo y el materialismo de la sociedad de consumo", expresó Rivera Carrera. Calificó como "ingente labor" la que queda por hacer a los cristianos que quieran seguir los pasos de Jesús al proteger a la niñez, puesto que se debe luchar contra "la cultura de la muerte", proclamar el derecho de los padres a elegir la educación de sus hijos, así como defender el derecho de los menores de crecer en un hogar armonioso y feliz. "Ingente labor nos queda por realizar a los cristianos si queremos seguir las huellas de Jesús y neutralizar el panorama sombrío de la sociedad frente a la infancia, defender y proteger al niño desde el kilómetro cero de su concepción , luchando contra la cultura de la muerte en sus expresiones más variadas (...) proclamar el derecho de los padres a elegir la educación de sus hijos, pues si son responsables de su desarrollo físico también lo son de su crecimiento espiritual, defender el derecho de los niños a un hogar feliz y armonioso", indicó el cardenal.