CHILPANCINGO, Gro.- Maestros de la Coordinadora Estatal de Trabajadores de la Educación de Guerrero (CETEG), en su intento de entrar al Congreso estatal, derribaron la puerta principal con su camioneta y prendieron fuego a dos mantas. Decenas de policías antimotines, con sus escudos, evitan que los disidentes ingresen al recinto legislativo, donde se prevé la comparecencia del gabinete de seguridad estatal y se tienen planeadas otras actividades. Los profesores lanzaron piedras a los antimotines, quienes las regresaron hacia los manifestantes. En el edificio legislativo se observa mucho humo derivado del polvo químico que los antimotines echan a los manifestantes de los extintores que portan y por el causado por las quemas que han realizado los docentes. En la avenida Trébol, adyacente al Congreso local, está estacionado el automóvil de la CETEG, con un aparato de sonido, donde un orador repite los hechos del 26 y 27 de septiembre, donde seis personas fueron asesinadas, entre ellas tres normalistas de Ayotzinapa. Los disidentes dieron al gobernador del estado, Ángel Aguirre Rivero, hasta hoy como ultimátum para la presentación con vida de los 43 normalistas desaparecidos. Hay tensión en la sede legislativa por las piedras lanzadas entre los policías y los maestros; el humo confunde las agresiones.
La Voz de Michoacán
