Redacción / La Voz de Michoacán Ciudad de México. El líder nacional de Morena, Mario Delgado, rechazó ser el presidente de un ‘narcopartido’, tal como acusó el gobernador de Michoacán, Silvano Aureoles Conejo. En entrevista con Joaquín López-Dóriga, el dirigente partidista aseguró que las declaraciones del mandatario michoacano a un medio nacional fueron una ‘cortina de humo’ para desviar la atención de que “va a tener que rendir cuentas” sobre su administración. “Lo que se va en Michoacán es el crimen organizado con Silvano Aureoles, él fue el que trató de inhibir la votación, en algunos casos con ayuda del fiscal”, declaró el líder partidista. Mario Delgado calificó los señalamientos de Aureoles como “patadas de ahogado” y aseveró que el mandatario “intentó de todo” para hacer una elección de Estado e imponer a su exsecretario de Gobierno, pero en su lugar “la ciudadanía de Michoacán votó para que se fuera”. “El gran miedo de Silvano es que va a tener que rendir cuentas del gobierno que hizo, y es un gobierno lleno de corrupción, un gobierno donde creció la violencia”, dijo. “El gobierno de Silvano Aureoles fue un desastre, es un gobernante corrupto que va a terminar en la cárcel”, sostuvo. El dirigente de Morena emplazó al mandatario michoacano a demostrar su afirmación de que Morena es un “narcopartido“, cuando, en realidad, dijo que es que su gobierno el que tiene presencia del crimen organizado en la entidad. Delgado negó que haya elementos para anular la elección en Michoacán, pues el pasado 6 de junio se registró una alta participación ciudadana y, con más de 70 mil votos obtenidos, Ramírez Bedolla fue el candidato más votado en la historia del estado. El morenista refirió que las descalificaciones de Aureoles Conejo contra Morena son porque “está ardido porque el PRD perdió lo único que tenía”, pues Michoacán es la única entidad gobernada por ese partido.