Tere Jaramillo/ La Voz de Michoacán Ciudad de México. México no sólo es el país más peligroso para ejercer el periodismo, también lo es para el sacerdocio y es que con la reciente muerte del padre Miguel Gerardo Flores suman 4 asesinatos a sacerdotes en lo que va del año. El 26 de abril se dio a conocer que el sacerdote Moisés Fabila, secuestrado en la Ciudad de México el pasado 3 de abril, fue encontrado muerto el 22 de abril por la mañana en la colonia Lomas del Sur, en el municipio de Emiliano Zapata, en Morelos. El miércoles 18 de abril, Rubén Alcántara Díaz, de la diócesis de Izcalli sufrió un ataque mortal. Las causas del homicidio aún no están determinadas. El viernes 21 de abril, Juan Miguel Contreras García, de la Arquidiócesis de Guadalajara, fue agredido en la parroquia donde servía para ser ultimado a balazos sin que haya resultados definitivos de las pesquisas. Y el pasado viernes 24 de agosto, un cuerpo en avanzado estado de descomposición fue encontrado este sábado en un predio de la población de Nueva Italia, cabecera de este municipio de Múgica, el cual pertenecia al padre Miguel Gerardo. El Centro Católico Multimedial (CCM) advirtió que para resolver las desapariciones que ocurren en el país "no bastan las buenas intenciones" y lamentó la desaparición y el hallazgo sin vida del sacerdote Miguel Gerardo Flores Hernández, quien realizaba sus actividades apostólicas en el Estado de Michoacán. La incertidumbre que acompaña a los familiares no desaparecerá de sus vidas sino hasta que den con el paradero de sus desaparecidos, y aquellos que están viviendo esta experiencia, esperan un pronunciamiento que los acompañe en su indignación". Será importante que el gobierno implemente medidas más severas para evitar que continúe la inseguridad en el país y contra los que son emisarios de paz. Con información de Agencias