Redacción / La Voz de Michoacán Ciudad de México. Ovidio Guzmán, detenido el 5 de enero en Sinaloa, afirmó este martes que él no es el hijo del capo Joaquín “El Chapo” Guzmán, contra el que existe una orden de extradición a Estados Unidos para juzgarlo por narcotráfico. “No soy la persona que ellos creen, que reclama Estados Unidos”, dijo como parte de su estrategia de defensa legal al iniciar su juicio de extradición en el Centro de Justicia Penal Federal de Almoloya, donde se encuentra recluido. Aseguró que las autoridades federales se equivocaron con su captura y que él no es la persona que busca la justicia estadounidense. En la audiencia celebrada este martes, se reveló que Estados Unidos presentó la petición formal de su extradición con base en dos nuevas acusaciones por 11 cargos de tráfico de drogas y lavado de dinero, presentadas en las Cortes Federales de los Distritos Norte de Illinois y Sur de Nueva York. En ambas peticiones, suscritas por el secretario de Estado de EUA, Antony Blinken, se advierte que el hijo de "El Chapo" podría ser condenado a la cadena perpetua, en caso de ser sentenciado por los delitos que le atribuyen. Washington busca juzgar a Ovidio por el crimen de asociación delictiva para distribuir cocaína, metanfetamina y marihuana en territorio estadounidense. La solicitud, que contiene el expediente con la información y evidencias recopiladas por el Departamento de Justicia, se turnó al juez Gregorio Salazar Hernández. El juez dio un plazo de tres días para que la defensa presente elementos en contra de las acusaciones. Una vez que estos se entreguen, correrá un plazo del 11 al 30 de marzo para que el juzgador analice dichas pruebas, mientras tanto Ovidio continuará en el penal del Altiplano.