Redacción / La Voz de Michoacán Ciudad de México. Marko Cortés se encamina al final de su mandato como presidente del Partido Acción Nacional (PAN) entre reclamos por el fracaso electoral, demandas de una reconfiguración e incluso exigencias por su renuncia anticipada. El oriundo de Michoacán tomó las riendas del blanquiazul en 2018, condenando la alianza que había impulsado la candidatura presidencial de Ricardo Anaya por “no dar los resultados esperados”. Ello sin imaginar que seis años después él cargaría con las críticas por la derrota del bloque opositor (conformado con el PRD y el PRI) en los comicios del 2024. “Este fracaso vergonzoso tiene nombre y apellido: Marko Cortés. (...) Aun así quiere imponernos un sucesor. ¿Qué busca? ¿Ponerle el último clavo en el ataúd de nuestro partido?”, advirtió el ex gobernador de Aguascalientes, Martín Orozco. De acuerdo con el Reglamento del Comité Ejecutivo Nacional (CEN), la persona electa como presidente o presidenta del partido durará en funciones tres años con una sola posibilidad de reelección consecutiva. Marko Cortés fue reelegido en octubre del 2021 en una sesión privada, en donde obtuvo más de 200 votos a su favor y 2 en contra. En aquel entonces hizo un llamado al “cierre de filas” para los comicios del 2022, aunque sólo pudieron asegurar la gubernatura de Aguascalientes, una de las seis que estuvieron en juego. La crisis interna terminó por desatarse luego de las elecciones del 2 de junio, las cuales fungiría como un parteaguas para redirigir el rumbo de Acción Nacional. Pero ¿quiénes han levantado la mano para asumir dicha misión? Jorge Romero: “El PAN no surgió ayer, ni se va a acabar mañana” El líder de la bancada panista en la Cámara de Diputados no ha ocultado su anhelo por la dirigencia de Acción Nacional, más aún con los resultados de la elección por la Presidencia de la República y en la Ciudad de México (CdMx). “Todo el voto que se mantuvo oculto en las encuestas, que era como de un 12%, nosotros siempre lo leímos y lo adjudicamos a que iba a ser un voto opositor y acabó siendo lo contrario”, comentó en entrevista con Milenio. El también presidente de la Junta de Coordinación Política (Jucopo)— y quien se hizo del primer lugar de la lista de plurinominales panistas a la Cámara de Diputados— reiteró en la necesidad de retomar la identidad del partido fundado hace más de ocho décadas. Y como parte de ello, consideró pertinente suspender la alianza con el Partido Revolucionario Institucional (PRI). “Yo creo que es de las primeras grandes reflexiones. (...) En lo partidista yo creo que es momento en que hagamos una pausa y nos pongamos a pensar cuál es el saldo final de lo que ha sido esta alianza”, aseveró, aunque dejó en claro que el bloque de contención podría continuar en el Congreso de la Unión. Pese a ello, afirmó que el partido abogará por las iniciativas en pro de la ciudadanía sin importar la bancada impulsora de dicho proyecto. Así, consideró que el mayor reto para Acción Nacional será acercarse a “un México que no nos voltea a ver como PAN”. “A lo mejor la gente nos dijo como oposición: ‘Bájenle a estar en contra de todo, todo el tiempo’. (...) A lo mejor el PAN no ha sabido acercarse a un México que es mucho más profundo”. Aún con las fallas y áreas de oportunidad, Jorge Romero se mostró optimista por el porvenir de la bancada: “El PAN se va a levantar. No surgió ayer, ni se va a acabar mañana”. E incluso reconoció al otro par de legisladores quienes también aspiran por corregir el camino de Acción Nacional: Adriana Ávila y Damián Zepeda. Una mujer en la dirigencia En 2024 el PAN cumplirá 85 años de existencia, en los cuales jamás ha sido dirigido por una mujer. “Por supuesto que es mi deseo ser la primera mujer electa por los panistas para dirigir el partido en el que he trabajado todos estos años”, señaló con determinación la diputada federal Adriana Ávila Fernández. La militante secundó los señalamientos de ex gobernadores y otros políticos por asuntos “poco éticos” y con “cierto olor a corrupción” dentro de la militancia, además de “la falta de organización” y “falta de democracia interna”. “El CEN ha estado alejado de la militancia. (...) El CEN centralizó sus decisiones sin comprender que hay realidades diferentes en todos los estados. Los órganos del partido actuaron sólo como oficialías de partes y los dirigentes partidistas se premiaron con posiciones seguras”, aunó en un video de X. Cabe señalar que la legisladora ya había hecho un llamado a una reconstrucción del partido poco antes de la reelección de Marko Cortés: “El PAN vive momentos complicados, pero con una gran área de oportunidad. Creo que somos el partido que tiene la posibilidad de regresar a la Presidencia”, dijo. Ahora sí, Damián Zepeda Fueron pocos meses en los que Damián Zepeda probó la gloria de la dirigencia nacional: el legislador subió por un año (2017-2018) a la presidencia panista en medio de la salida de Ricardo Anaya (su mano derecha) para contender a la presidencia. Por ello será en 2024 que peleará por ‘la experiencia completa’, de igual modo, a fin de reivindicar al partido ante la derrota electoral. “¿Por qué no hubo la capacidad de entusiasmar? También caímos en la guerra de odios”, declaró en entrevista con Milenio, descalificando la alianza con el partido de Alejandro Moreno y considerando a Movimiento Ciudadano (MC) “como una mejor opción de representantes”. Zepeda Vidales es originario de Sonora, en donde se graduó como Licenciado en Derecho por la Universidad de Sonora. Su intención por volver a la cabeza del blanquiazul la dio a conocer desde febrero del 2024, cuando también respaldó a la entonces candidata Xóchitl Gálvez. “El PAN tiene que recuperar el rumbo. Trae la brújula perdida”, manifestó.