Notimex / La Voz de Michoacán México, 6 Jun.- El derecho es en la práctica lo que está aportando validez y eficacia a las decisiones políticas plasmadas en el Pacto por México, aseguró el presidente nacional del Partido Revolucionario Institucional (PRI), César Camacho. Al ingresar como miembro de número de la Asociación Nacional de Doctores en Derecho (ANDD), dijo que el propósito del Pacto por México es alcanzar una democracia eficaz y una sociedad de derechos plenos para todos, con cuyos primeros resultados se transita de la fuerza de la razón al poder de la ley. En ese sentido destacó que ese instrumento, que a su juicio tiene muchas de las características de los grandes acuerdos políticos de la democracia en el mundo, se despliega echando mano de la política y el derecho al servicio de México. Ante el presidente de la asociación, Elías Huerta Psihas, y la directora de la Facultad de Derecho de la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM), María Leoba Castañeda Rivas, dijo que ese acuerdo no tiene deducibilidad jurídica, pero está cobrando el poder de los buenos resultados. Sin embargo, aclaró que es importante señalar que es sencillamente una instancia de concertación, no una persona jurídica y menos una autoridad, que no sustituye ni pretende reemplazar ni competir con ningún poder o institución. En el Centro Libanés, el dirigente priista expuso que el pacto no ha creado burocracia ni generado capítulo en el gasto público; es un acuerdo basado en el poder de la palabra, la que -advirtió- quizás sea su debilidad y a la vez su fuerza, ante la hombría de bien y el patriotismo de sus suscriptores. Antes que para nadie, manifestó, el pacto es útil para el Poder Legislativo, de integración plural y colegiada, pues recoge de la sociedad y de importantes sectores organizados inquietudes, planteamientos y expectativas que han sido formulados en ocasiones desde hace décadas. Incluso Camacho Quiroz equiparó al Pacto por México con el Pacto de la Moncloa en España (1977), el Acuerdo Nacional para la Transición a la Democracia Plena en Chile (1985) y con la Convención Nacional por una Sudáfrica Democrática (1991). Subrayó que estos tres pactos históricos jugaron un papel fundamental en esos países y en el mundo, y son hitos en la historia de la democracia; modificaron el perfil de naciones enteras y son ahora motivo de orgullo nacional en su territorio. Sostuvo que en el caso de México el pacto tiene muchas de las características de esos grandes acuerdos políticos y "está alcanzando la talla de acontecimiento histórico".