Ciudad de México.- Con un minuto de silencio, que terminó con aplausos de todas las fuerzas políticas, el Senado rindió un homenaje a la senadora Mónica Arriola Gordillo, del Partido Nueva Alianza, quien falleció esta madrugada a los 44 años de edad debido a un padecimiento de cáncer cerebral. Por quinta ocasión, el pleno de la Alta se vistió de luto, y en tribuna se colocó un retrato de la senadora chiapaneca, y dos moños negros. Los senadores suscribieron el último punto de acuerdo enlistado por Arriola Gordillo, que todavía este martes fue publicado en la Gaceta Parlamentaria, en el cual exhorta a la Cámara de Diputados a expedir, de manera urgente, la Ley General de Desaparición Forzada de Personas. Al hacer uso de la palabra, senadoras y senadores reconocieron el trabajo parlamentario de su compañera, pero sobre todo que “era una luchadora”, quien siempre esbozó una sonrisa. El presidente del Senado, Roberto Gil, recordó que Arriola, hija de Elba Esther Gordillo, en dos ocasiones enfrentó el cáncer, la primera vez logró superar esa prueba, pero la segunda la enfermedad fue más fuente que su voluntad. “Luchó siempre, nunca perdió la fe, la alegría, ni las ganas de vivir, lucho en silencio como si no quisiera compartir con nadie su dolor… Vamos a extrañar mucho a Mónica Arriola Gordillo, nuestra querida amiga, nuestra querida compañera”.