Trabajadores sindicalizados, supernumerarios y de confianza, que pertenecen al Sindicato Único de Servidores Públicos del Estado de Guerrero (SUSPEG), tomaron las instalaciones del Palacio de Gobierno en demanda del pago de un bono sexenal y el incremento al estímulo por antigüedad para más de 5 mil burócratas. Bajo una lluvia pertinaz, los empleados gubernamentales encabezados por su dirigente Rodolfo Calderón, a las 07:00 horas de este lunes, por dependencias en las que laboran, se distribuyeron las puertas de acceso al edificio del Poder Ejecutivo, en cuyo interior se encuentran policías antimotines estatales. El dirigente del SUSPEG informó que igualmente otros trabajadores tomaron los edificios Vicente Guerrero y de la Secretaría de Finanzas (Sefina), que se encuentran ubicados en el centro de esta capital (donde funcionan varias dependencias del gobierno estatal), con el mismo fin de que el actual gobierno, que está de salida, les garantice el pago del bono sexenal. Indicó que el titular de Sefina, Eliseo Moyao, se niega a recibir a los dirigentes sindicales y sólo les ha enviado recados en los que les propone una reunión para el próximo miércoles, porque asegura que no hay dinero, “pero nosotros no podemos esperar más porque ellos ya van de salida”. Los empleados gubernamentales, unos con paraguas y otros con impermeables, se instalaron en las tres entradas del Palacio de Gobierno para impedir la entrada a funcionarios y del propio gobernador interino, Rogelio Ortega, como medida de presión para que se les autorice el pago del citado bono y un incremento al estímulo por antigüedad para más de 5 mil trabajadores gubernamentales.
La Voz de Michoacán
