El Universal / La Voz de Michoacán Ciudad de México. A través de la operación Rompiendo Cadenas (Roca), la Procuraduría General de la República (PGR) rescató a mil 293 víctimas de trata y detuvo a 283 personas por su probable responsabilidad en este ilícito, tráfico de personas o delitos conexos. De agosto de 2017 al 15 de marzo de 2018, personal de la Agencia de Investigación Criminal (AIC), la Subprocuraduría Especializada en Investigación de Delincuencia Organizada (SEIDO) y la Fiscalía Especial para los Delitos de Violencia Contra las Mujeres y Trata de Personas (Fevimtra) implementaron acciones operativas contra este delito en el Estado de México, Puebla, Tlaxcala y la Ciudad de México. En el marco de la Reunión de la Sub Comisión Técnica Contra la Trata de Personas y el Tráfico de Migrantes e INTERPOL, celebrada en San José, Costa Rica, la PGR presentó los resultados de la colaboración interinstitucional entre el gobierno de la República y autoridades estatales. Dio a conocer que la PGR colaboró con las fiscalías del Estado de México, Puebla, Tlaxcala y la Procuraduría General de Justicia de la Ciudad de México, lo que, aseguró, permitió prevenir y perseguir estas actividades delictivas. La dependencia señaló que también se llevaron a cabo diversas actividades como cursos de “Trata de Personas con fines de explotación en los trabajos o servicios forzadas” y “actualización en materia de trata de personas desde una perspectiva de los Derechos Humanos con enfoque de género e infancia”. Además indicó que la Agencia de Investigación Criminal, con la publicación de notificaciones amarillas, para la localización de personas desaparecidas, y fichas rojas, para la búsqueda y detención de personas buscadas por la justicia, brindó apoyo permanente para combatir delitos que lastiman a la sociedad a nivel internacional. En el encuentro participaron representantes de Belice, Colombia, Costa Rica, El Salvador, Guatemala, Honduras, Nicaragua, Panamá y República Dominicana. La PGR refrendó su compromiso con la sociedad para combatir los delitos en materia de trata y tráfico de personas, a través de acciones conjuntas basadas en coordinación interinstitucional y colaboración policial internacional.