José Luis Ceja/La Voz de Michoacán Sahuayo, Michoacán. En la intención de evitar nuevas sanciones por parte de las dependencias relacionadas a temas del medio ambiente, los municipios de la Región Ciénega analizan ya la viabilidad de generar proyectos conurbados para dar solución al conflicto. De acuerdo con los resultados de la reunión sostenida entre autoridades locales y los representantes de las dependencias estatales y federales relacionadas con el medio ambiente, la intención es lograr dar el tratamiento adecuado a las 200 toneladas de basura que se generan en los municipios de Sahuayo, Jiquilpan, Pajacuarán, Venustiano Carranza y Villamar para lo que se plantea una inversión de 298 millones de pesos. Sahuayo albergará un Centro Intermunicipal de Tratamiento Integral de los Residuos Sólidos (CITIRS), mismo que será ejemplo a nivel nacional pues servirá para disminuir la contaminación ambiental que afecta al Lago de Chapala, luego que con la misma inversión se contempla la clausura y recuperación de los tiraderos a cielo abierto que estará a cargo de la empresa que logre la licitación de esta obra una vez que el Congreso del Estado determine la vía legal por la que habrá de desahogarse el proceso jurídico para la posterior licitación, temas que habrán de analizarse en enero próximo que se celebre una nueva reunión de análisis. Entre los planteamientos analizados en la reunión sostenida se señaló que será el municipio de Sahuayo el que albergará el Centro Intermunicipal de Tratamiento Integral de los Residuos Sólidos (CITIRS que se usará para disminuir la contaminación ambiental que afecta al Lago de Chapala y que esta misma inversión contemple la clausura y recuperación de los tiraderos a cielo abierto de los cinco municipios de la región. Durante la reunión sostenida en las instalaciones de la Universidad De la Ciénega del Estado de Michoacán de Ocampo, Ricardo Luna García, titular de la Secretaría de Medio Ambiente, Recursos Naturales y Cambio Climático (SEMARNACC), adelantó que con esto se logrará dar tratamiento adecuado a las 200 toneladas de basura que se generan en estos cinco municipios localizados en la cuenca del Lago de Chapala y, por su cercanía con ese cuerpo de agua, toda la basura mal depositada o tiraderos clandestinos, generan lixiviados que van a parar al fondo del lago, de allí la urgente necesidad de encontrar mecanismos de inversión que ayuden a disminuir este tipo de contaminación. La inversión para la construcción de este CITIRS, de 143.8 millones de pesos a través del Banco Nacional de Obras y Servicios (Banobras),, es una inversión no recuperable que se destina para atraer inversión privada; para el resto, se lanzará una licitación pública para que la iniciativa privada pueda realizar la coinversión hasta por el total del monto del proyecto. Se señaló que bajo este esquema, los municipios no tendrán que hacer ningún tipo de inversión y únicamente pagarán por los servicios que preste la empresa ganadora de la licitación como ocurre con otro tipo de servicios como energía eléctrica o agua; en ese sentido el tema central, se señaló, es pedir al Congreso del Estado que forme parte de estos esquemas y autorice a los Ayuntamientos a que puedan adquirir este tipo de contratos para que todo pueda hacerse dentro de los marcos normativos vigente.