Lázaro Cárdenas, Mich.- Las tradicionales ceremonias centrales del mes de la patria, “el grito” y el desfile del 16 de septiembre, tuvieron este año un viraje para llamar la atención; no hubo cena oficial después de las arengas, y la parada fue encabezada por el órgano de gobierno, como hace al menos 50 años que no sucedía. La ceremonia del grito, que se desarrolló bajo un estricto protocolo militar a cargo de la X Zona Naval, quien tomó el control del palacio municipal, desde las 13:00 cuando pidió a empleados y usuarios del inmueble, retiraran sus vehículos de los estacionamiento, El cerco de seguridad considero al menos tres cuadras a la redonda del mismo edificio, donde apostó francotiradores y personal a pie para cuidar la seguridad. Así, mientras en la explanada los asistentes dieron paso a la romería con juegos mecánicos y comida de todo tipo, en la planta alta, en la sala de cabildo, esta vez, confiaron los asistentes, no hubo la tradicional cena en honor de los funcionarios e invitados especiales al evento, que esta vez, tuvieron que contentarse “con un snack” y un brindis. Más información buscar la edición impresa de La Voz de Michoacán del 16 de septiembre de 2015.