Angélica Ayala/La Voz de Michoacán Pátzcuaro, Michoacán.- Entre los muchos sabores y olores de las ofrendas para recibir a las ánimas, está un elemento que da el sabor dulce del azúcar: las calaveritas elaboradas con éste endulzante y adornadas con azúcar glas pintada de colores llamativos. Estas calaveritas son una tradición de hace más de 50 años, que empezaron a venderse en el portal Hidalgo de Pátzcuaro. De acuerdo, al relato del cronista de la ciudad, Enrique Soto González, a finales del siglo XIX las familias de la ciudad, elaboraban dulces de calabaza o membrillo para esta temporada de noche de ánimas siendo las madres Dominicas quienes realizaban los alfeñiques en miniatura, que representan los platillos típicos de la región, como las corundas, el mole, tortillas, atoles, pan, entre otras, todo elaborado con azúcar glas. La dulce tradición de las calaveritas, la iniciaron algunas familias de Pátzcuaro, como una manera de mejorar su economía pasando de una generación a otra como el caso de la señora Susana Cervantes, quien tiene 25 años vendiendo cada año las figuras de azúcar, porque además de las calaveras, están ángeles, perros, carros, botellas, gallinas, por mencionar algunas. Todas se colocan en los altares u ofrendas para las ánimas, en especial en la de los “angelitos” que son niños que murieron en el transcurso de este año. Para más información consulte la edición impresa del 23 de octubre.