Carlos Casillas / Corresponsal La Voz de Michoacán. Lázaro Cárdenas, Mich.- En unos dos meses más, el consejo de administración del fideicomiso que opera la isla de La Palma, deberá tomar una decisión sobre cuál será la metodología para asignar la tierra en ese espacio y desarrollar los proyectos de inversión que existen para ella. Lo anterior lo dijo aquí el presidente del Consejo Coordinador Empresarial, y uno de los cinco consejeros de ese fideicomiso –tres de ellos de este puerto- quien dijo que tras la última reunión sostenida por éste órgano rector, se evidenció que efectivamente se está trabajando, solo que de “escritorio” en la realización de planes y proyectos para la isla de La Palma que, sin embargo, cualquier inversión en la misma se encuentra detenida por los litigios agrarios que enfrente frente a campesinos de Santiago Zacatula, quienes reclaman pagos de tierras excedentes en ese sitio. Apuntó que en cuanto a la forma tener espacio en las más de 440 hectáreas, se analizan tres posibles maneras, renta, un sistema federalizado o en comodato, pero en ninguna figura la venta del bien a favor de particulares. Benjamín Rodríguez reconoció que en el seno de la Secretaría de Desarrollo Económico, si se está trabajando en algunos proyectos para el desarrollo de la isla de La Palma y en la última reunión se aprobó que sea la Administración Portuaria Integral, quien realice los proyectos de conectividad de la isla del Cayacal a La Palma, donde se ubicarán las instalaciones del Recinto Fiscalizado Estratégico, con la aduana, donde se habrán de colocar vías férreas y carreteras. No obstante lo anterior dijo que el litigio agrario a que se encuentra sometida la isla de La Palma frente a campesinos y ejidatarios del vecino municipio de Zacatula, Guerrero y de Guacamayas, que reclaman el pago de unas 120 hectáreas que resultaron excedentes, aseguran, de las expropiaciones, nada de lo que se proyecte puede aterrizar porque se trata de procesos “engorrosos y tardados”. Apuntó que la falta de inversión está relacionada con la falta de certidumbre que este proceso agrario arroja sobre los inversionistas quienes al no ver garantizada la seguridad de la tenencia de la tierra, optan por guardar sus proyectos. El presidente del Consejo Coordinador dijo, en ese sentido, que tanto ejidatarios como gobierno de la entidad deben negociar con congruencia y sensibilidad para encontrar una vía alterna a la inversión en tanto se llega a un resultado final de la controversia, aunque la inversión quedará siempre a la decisión de quien la vaya a realizar, pero dijo que el desarrollo de esa zona industrial y de negocios, es impostergable.
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