La vida hoy está en red… pero lamentablemente las escuelas parecen haberse quedado atrás. Los estudiantes tienen hoy en día otras estructuras cognitivas, pero la escuela todavía sigue con la estructura cognitiva del siglo XIX. Bajo este punto de análisis el expositor César Augusto Pérez Gamboa presentó la primera conferencia magistral de la Feria Nacional del Libro Michoacán 2015, bajo el título: “Trayectorias de aprendizaje en la era de la hiperconectividad. Libros en Red y M-Learning”. Con cifras y datos de estudios y publicaciones recientes, el ponente explicó que hay un cambio en el cerebro humano, originado por el uso del móvil o smartphone, gadgets que “se han convertido en extensiones del cerebro” precisó. Ayer y hoy Su conferencia vino a echar por suelo los argumentos conservadores que tachan de perjudicial el uso del internet y las redes sociales. El ponente incluso señala como necesario el uso de las redes sociales en las aulas, para enriquecer los conocimientos. Y es que, las generaciones de hoy han adquirido nuevas y sorprendentes capacidades y un pensamiento más flexible: “¿Que no es posible ser multitareas?, eso era antes, cuando nuestro cerebro no estaba adaptado. Ahora es posible estar en whatsapp, procesando ideas, escribiendo y escuchando a la vez”, señala Pérez Gamboa. Hablamos de una nueva ecología de aprendizaje que a muchos asusta, pero por la cual otros tantos apuestan fuertemente. Si bien la hiperconectividad es acusada de provocar el aislamiento del individuo, también es cierto que aunque estamos más solos físicamente, estamos más conectados y compartiendo con otros espacios diferentes. “La adicción y el aislamiento sí pueden ser un problema que habrá que prever, pero no tiene que ver con lo digital”, señala el ponente. “Se le culpa a la tecnología de problemas pre-digitales”, asegura el expositor. “En los años 40 se decía que la televisión provocaba que las familias ya no conversaran porque estaban todos frente a la pantalla… todo eso es un problema de valores, no un problema digital”, explica. Los argumentos conservadores nos indican también que los elementos digitales generan dispersión y superficialidad, “sin embargo, cuando apareció el libro, también se decía que este provocaba la pérdida de memoria”, recordó el expositor. Ciudadanos del mundo Ahora tenemos un cerebro interconectado y podemos discutir desde la escuela pero con otras escuelas y de otros países. Hoy podemos estar en cualquier parte del mundo conectados, discutiendo temas y aprendiendo. Ser ciudadanos hiperconectados nos hace ser no solo de Michoacán, de México o de América Latina: nos convierte en ciudadanos del mundo. Los cerebros interconectados nos permiten mejorar la forma de construir un pensamiento colectivo, son formas de aprendizaje que rebasan hoy a las escuelas. “La hiperconectividad nos permite otras formas de lectura y de escribir el conocimiento”, asegura. “El cerebro se está reformando. Los niños nacen interactuando con diferentes tecnologías, por lo tanto hay una amplificación y una reorganización congnitiva”, subraya. “Es una ecología diferente a la analógica, y también una ecología que necesita mayor responsabilidad”, sentencia el ponente, quien argumenta una necesidad de mejoras en los contenidos, pues la gente de hoy puede interactuar, aportar y generar información, por lo que resulta urgente analizar el contenido que estamos dando a las demás personas a través de la red. “Lo que se busca hoy es que los estudiantes logren clasificar la información y descartar el 99% de los que se tiene”, señala César Augusto. Nuevas formas de aprender “Antes se educaba para un proyecto de vida o una profesión… hoy el aprendizaje consiste en adquirir capacidades para seguir aprendiendo durante toda la vida”. La escuela debe fortalecerse con cursos en línea, laboratorios virtuales y redes sociales que les ayuden en la construcción de conocimiento, según dijo el expositor a la audiencia. Esta evolución ya llegó a los libros, que han saltado de sus ediciones físicas impresas, a todo un proceso interactivo, personalizado, conectado y aumentado. La historia del libro nos habla del papiro como una forma donde no era tan fácil el acceso a la información. Con los libros impresos el problema fue “el descubrimiento de la información” y ahora con los e-book el reto consiste en saber evaluar y organizar la información. Ahora los libros están en red, en programas con gráficos, vínculos, hipertextos, conexiones, videos, audios, con discusiones que permiten agigantar la idea del autor, lo que nos lleva a autores múltiples, lectores múltiples y editores múltiples que nos permiten comprender y aprender de otra manera. Los libros de hoy ya no solo se hacen con correctores, sino también con programadores. Cerebros hiperconectados ¿Cómo se estudiará dentro de 30 años? Los analistas indican que se mejorará notablemente la manera de construir el conocimiento y que habrá que re-pensar la manera en cómo aprendemos hoy. “La existencia de la tecnología móvil genera transformaciones en el cerebro, que nos permiten construir de manera diferente”. El cerebro humano tiene cien mil millones de neuronas, hiperconextadas entre sí. Cuando tenemos elementos móviles (como el Smartphone o la tablet) nuestra posibilidad de conectarnos crece, porque ahora no solo tenemos nuestro cerebro humano, sino varios cerebros conectados”, explica. “Hoy, la cantidad de cerebros existentes hiperconectados permite que aprendamos más y mejor”. Se explicó que nuestras neuronas de lectura son diferentes. “El futuro de la identidad individual ha cambiado a la posibilidad de una identidad colectiva”. “Estamos en la era virtual, y por lo tanto nuestro cerebro se ha transformado para la compresión de otra manera. La escuela tiene una discusión entre su realidad y la realidad de los alumnos de hoy que están hiperconectados”.