Carlos Casillas/La Voz de Michoacán Lázaro Cárdenas, Michoacán. A casi ocho años de haberse puesto en operación, el llamado puente Albatros, en el interior del recinto portuario, no ha contribuido del todo a aligerar el tráfico pesado por las calles de la ciudad, como era su propósito, ni a evitar el deterioro de las vialidades. Y es que, camiones de carga pesada que se dirigen al centro del país, vía capital del estado o viceversa, todavía cruzan por la zona urbana de la ciudad, al resultarles inútil el tramo del libramiento al interior del Recinto Fiscalizado y Portuario que se comunica a través del Puente Albatros. Aùn así , a casi ocho años de su inauguración, la ruta de estos camioneros que mueven mercancías de y hacia el interior del recinto portuario, lo hacen por la carretera federal que conecta a la autopista Siglo XXI, pasando los “puentes cuates” con salida del Puente Ignacio Chávez, y para ello tiene que pasar por el libramiento “Sicartsa”. Este transporte de carga pesada, que se pretendía desviar por la nueva vialidad federal, sigue colapsando el tráfico de la ciudad, al ser disfuncional el puente Albatros, que da salida o entrada a la carga del recinto portuario, y que fuera inaugurado el 7 de junio del 2010. Se estima que cada día se mueve hasta 300 unidades pesadas con diversas cargas; contendores, autos, combustibles, graneles y otros diversos, además de los productos terminados y subproductos de acero de la empresa ArcelorMittal que, al igual, recibe una importante cantidad de unidades con materia prima para sus procesos, tales como calizas, mineral a granel y demás. No obstante, las restricciones que deberían hacerse efectivas para la circulación de estas unidades por la zona urbana, cuya carpeta asfáltica no es compatible ni calculada para el peso de estas unidades y la carga, éstas circulan libremente con el conocimiento y vista de la autoridad vial. Para más información checa nuestra edición impresa del 13 de febrero.