Un hermoso paisaje de fondo es el que ofrece el muelle de Pátzcuaro, donde a diario decenas de turistas tanto nacionales como extranjeros abordan una lancha con dirección a la isla de Janitzio, cuya comunidad indígena aún conserva la autenticidad de sus costumbres. Janitzio, que significa “Cabello de elote”, destaca por su pintoresca arquitectura, compuesta de tabiques y tejas rojos; exquisita gastronomía, siendo el pescado blanco el platillo más tradicional; artesanía en madera y telar, y sus rituales tradicionales, entre ellos la velación de la noche de muertos. Sin duda, para los pobladores de la isla, el 1 de noviembre es un día colmado de evocaciones, ya que durante la noche es costumbre llevar las ofrendas a los muertos, a través de una procesión iluminada con cirios y animada con cánticos religiosos. Rumbo a la Isla se observa a lo lejos un monumento de José María Morelos y Pavón, héroe nacional de la Independencia. La estatua, cuya altura es de 40 metros, tiene en su interior una colección de pinturas que describen la biografía del insurgente mexicano y un mirador en el que se pueden apreciar los alrededores de la isla y gran proporción del lago de Pátzcuaro. Antes del arribo a la isla, decenas pescadores hacen uso de sus redes de mariposa para ofrecer un espectáculo a los visitantes, a fin de obtener unas monedas. De acuerdo con el comerciante Guzmán Servín, originario de Janitzio, las temporadas más fuertes son Navidad y Semana Santa. Es de mencionar que recientemente la Secretaría de Turismo de Michoacán informó que invertirá 20 millones de pesos en el Proyecto de Mejoramiento de la Imagen Urbana de esta isla de Janitzio, con el objetivo de rescatar la riqueza cultural y natural de la localidad, así como rehabilitar en forma ordenada y controlada los espacios públicos.