Eduardo Ruiz / Corresponsal La Voz de Michoacán. La Piedad, Mich.- Lluvias atípicas de una intensidad no registrada en los últimos 40 años, se precipitaron durante las primeras horas de éste sábado sobre los municipios de La Piedad, Michoacán y Pénjamo, Guanajuato, provocando el desbordamiento de ríos y arroyos. Las estimaciones varían de acuerdo a la fuente de información, pero se manejan cifras de hasta 800 familias afectadas. Los ríos Lerma, Turbio y Angulo se encuentran a su máxima capacidad, por lo que podrían generarse nuevos daños en comunidades rurales de los municipios de Penjamillo, Numarán y Angamacutiro. Hasta el momento, se reportan seis comunidades rurales ubicadas en la zona limítrofe de Michoacán y Guanajuato, que se encuentran incomunicadas por el desbordamiento del río Huáscato, en el punto donde se une al río Lerma. En la cabecera municipal de Pénjamo, entre las siete y las ocho de la mañana de éste sábado, comenzó a fluir una gran cantidad de líquido procedente de los cerros que rodean dicha demarcación, además de que, como medida preventiva, las autoridades de la Comisión Nacional del Agua comenzaron a desfogar la presa “La Golondrina”. Esto provocó una severa inundación en la zona centro del municipio, afectando un centenar de viviendas y negocios ubicados sobre la calle Joaquín Pardavé y margen del Lerma. Los vecinos subieron a las azoteas de sus casas en espera de ser rescatados por elementos del Ejército Mexicano y de Protección Civil, para posteriormente trasladarse a casas de familiares y vecinos. Se han abierto, hasta el momento cinco albergues para recibir damnificados. “Nos reportan que vienen 250 personas de las rancherías cercanas a Numarán, que están siendo trasladadas para acá porque se les inundaron sus casas”, informó la titular de Desarrollo Social de Pénjamo. Hasta el momento, se han reportado dos personas lesionadas que fueron arrastradas por la corriente. “Se trata de un niño que sufrió una fractura en las costillas y una mujer embarazada que se cayó y tuvo que ser rescatada por Protección Civil”, dijo el alcalde de Pénjamo, Jacobo Manríquez. Por su parte, el edil Hugo Anaya se ha puesto en comunicación con su homólogo guanajuatense para coordinar las labores de emergencia, dado que en la zona del margen izquierdo del río Lerma, específicamente en Santa Ana Pacueco, hay por lo menos 125 familias que están evacuando sus viviendas ante el riesgo de que se desborde el afluente. El personal de Protección Civil Municipal en La Piedad ha estado monitoreando los niveles de crecimiento del cauce viejo del Lerma, reportando que “en las últimas horas se ha mostrado un descenso en los volúmenes, debido a que se abrió una de las compuertas, la que está en el CBTIS, pero el problema es que no ha dejado de llover y está bajando mucha agua de los cerros”, dijo Juan Gabriel Núñez Naranjo, coordinador de PC. Hasta el momento, en Pénjamo se estima que hay entre 300 y 350 personas afectadas, tras el desborde del río Huáscato el cual se deriva de la presa La Golondrina, por lo que se optó por desfogar el cuerpo de agua, dado la lluvia atípica que se prolongó por cinco horas durante la madrugada de este sábado. El presidente municipal, Jacobo Manríquez aclaró que la situación está controlada, pues no se trata del desborde de la presa como varias familias temían, no obstante ante la contingencia ya se solicitó apoyo de las autoridades estatales e incluso el Ejército Mexicano para el apoyo de las personas que perdieron sus viviendas. Refirió que los puntos con mayor afectación fueron la zona centro de la ciudad, El Huarapo y el poblado de la Granjena, pero no se descarta la posibilidad de que haya más damnificados, pues se trata de todas aquellas personas que habitan al margen del río. De igual manera, se dio a conocer que en el Fraccionamiento San José de La Piedad, se registró un deslave de una zona cerril, lo que provocó el colapso de dos viviendas, las cuales fueron evacuadas por las autoridades municipales.
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