José Luis Ceja/La Voz de Michoacán Jiquilpan, Michoacán. Derivado de la no ejecución de obras que estaban ya autorizadas en materia de infraestructura agrícola, el 70 por ciento de la producción de grano estimada para el ciclo de cosecha de noviembre próximo podría perderse por inundaciones y contaminación. De acuerdo con lo externado por Rogelio Valdovinos Sánchez, Comisariado del Ejido Jiquilpan, son tres los puntos en los que se concentran el problema de la falta de infraestructura para el desalojo de aguas residuales que podrían descargar en zonas de cultivo; entre éstos, el líder del núcleo agrario destacó la llamada Cerca Doble, en los límites entre Jiquilpan y Sahuayo, las cercanías de la Planta LICONSA y el potrero denominado como El Ramireño. En estos tres puntos, dijo, los productores enfrentan el riesgo de descargas residuales aunque en el caso de las cercanías de la Planta Liconsa se había autorizado la obra de entubamiento de las aguas residuales de la paraestatal hasta el canal Yerbabuena de manera paralela a la carretera, obra que finalmente nunca se ejecutó. Los dos puntos restantes, agregó sufren las descargas de los asentamientos urbanos de la zona limítrofe y las descargas residuales del corredor de restaurantes ubicados a los costados de la carretera Jiquilpan y Sahuayo lo que sumado a la deficiente red de desalojo que actualmente opera hace temer a los productores que en caso de intensificarse el temporal de lluvias puedan darse inundaciones en zonas de cultivo y aún en zonas habitacionales de la tenencia de Francisco Sarabia. Agregó que entre los productores se ha estimado que en caso de que las lluvias sean las que se han pronosticado, la perdida por desbordes, anegaciones y contaminación con aguas residuales será cerca del 70 por ciento de la producción estimada sobre todo en maíz lo que se complica con el adelanto en el ciclo de lluvias que esta temporada se dio al menos 10 días antes de lo habitual. Sobre el tema de la contaminación por aguas residuales a la que está expuesta la producción de granos y hortalizas de diversas zonas de cultivo, Valdovinos Sánchez aseguró que estas zonas fueron ya revisadas por personal de la Comisión Nacional del Agua, la Comisión Estatal del Agua y las autoridades municipales y aun cuando hace unos meses recibió la llamada del entonces diputado local por este distrito en la que se le informaba que el proyecto de entubamiento de aguas residuales se había aprobado, éste proyecto no se realizó finalmente sin que se diera una explicación a los representantes de los ejidatarios. Es de precisar que, de acuerdo a lo externado en su momento por el titular de la Comisión Estatal de Aguas y Gestión de Cuencas de Michoacán había ya aprobado un proyecto con una inversión de once millones de pesos para la construcción de una planta de tratamiento de aguas residuales en la zona limítrofe entre Jiquilpan y Sahuayo, obra de la que, actualmente, se desconoce su estado. Sin embargo, de acuerdo al presidente de los agroproductores jiquilpenses el problema es que cualquier acción que se emprenda en estos momentos no remediaría la situación debido a que no se ejecutaron en los tiempos requeridos.
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