Lázaro Cárdenas, Mich.- Luego que no se concretara ninguna mesa de negociación con autoridades de secretarías federales, transportistas de este puerto determinaron continuar este viernes su marcha a pie a la capital del estado que emprendieron el martes dos de diciembre. Tras ocho días de haber permanecido en la caseta de Santa Casilda de la autopista siglo XXI, donde hicieron a un alto la petición del gobierno del estado que ofreció concretar una mesa de negociación con funcionarios de la secretaria del Trabajo, Economía y de Comunicaciones y Transportes para que conocieran del problema que se enfrenta en el sector, y ante el hecho de que finalmente no se dio la misma, más de 300 transportistas que han caminado casi 200 kilómetros, emprendieron la marcha esta tarde a la capital michioacana para demandar ante el gobernador Jara Guerrero, una solución a la falta de empleo. Alvar Santillán López, vocero del movimiento en el que participa el Frente Cívico Michoacano, dijo que finalmente se concretó una burla contra su movimiento y una falta de respeto a la palabra empeñada, por lo que la tarde del viernes emprendieron de nueva cuenta el recorrido a Taretan donde pernoctarán. Si bien dijo que estuvieron en las oficinas del Senado de la República a donde acudieron en comisión creyendo que sería ahí el encuentro con los funcionarios federales, no se trató sino de una simulación orquestada por el comisionado federal para ganar tiempo y atrasar una respuesta a un problema que por sus motivos, es genuino y como se ha visto, valorado y apoyado por las comunidades por las que han pasado. El problema de la recuperación de las fuentes de empleo perdidas, tanto por que la empresa acerara ArcelorMittal les escamoteó de manera unilateral y sin argumento legal válido un contrato de trabajo de 40 años, como por la paralización del servicio de acarreo de mineral tras la acción del gobierno federal, que dejó sin oportunidad de trabajo a más de mil empresarios del transporte local. Santillán López, dijo, finalmente, que está visto el poco interés del comisionado para la seguridad por “ solucionar el problema que el mismo generó”, por lo que toca finalmente al gobernador Jara Guerrero asumir la responsabilidad de lo que ocurre en su estado y van por esa respuesta.