Redacción Web/La Voz de michoacán. Morelia, Michoacán a 16 de diciembre de 2013.- Surfear, avistar aves y otras especies naturales, pasear en lancha, conocer distintos tipos de ecosistemas marinos, atestiguar el nacimiento de tortugas marinas y hasta ser partícipe de su conservación, son algunas de las cosas que le esperan al visitante de la costa michoacana, particularmente en los municipios de Aquila y Coahuayana. La riqueza gastronómica de la región ofrece incontables recetas a base de los productos que ofrece el mar, combinados con los frutos de la tierra abundante en especies tropicales como el plátano, papaya, jamaica, limón, coco, azúcar, entre muchas otras. En su perfil cultural, la costa michoacana es Nahua. Destacan las fiestas, tradiciones, idioma, vestuario y artesanías, tanto textiles como de madera y de barro que forman parte de la identidad de la etnia que puebla la franja costera de Aquila. Para descansar en Aquila sobresale la red de Paradores Turísticos ubicados en las comunidades de La Ticla, La Manzanillera, Ixtapilla, Colola, Maruata, Zapote de Tizupan, El Zapotán, Palma Sola y próximamente también en Zapote de Madero. Los paradores ofrecen servicios de hospedaje diferentes a lo tradicional: Tejabanes: tienen servicios sanitarios, electricidad y regaderas para atender a quienes prefieren alojarse áreas techadas pero sin paredes. Idóneas para utilizar bolsas de dormir, hamacas o tiendas de campaña. Cabañas: para alojar viajeros solitarios, lunamieleros o grupos familiares. Cabañas comunitarias: tipo albergue alpino, donde los viajeros encuentran camas individuales donde comparten las instalaciones sanitarias y regaderas. En extensión territorial, Aquila más grande que el estado de Colima; es el municipio con mayor superficie del entidad y en contraste, el de menor densidad poblacional. Aquila y Coahuayana conforman un entorno rico en biodiversidad, que atraen cada año a numerosos visitantes nacionales y extranjeros, tanto por sus magníficas olas idóneas para el surf, principalmente en las playas de La Ticla y Nexpa, como por las largas temporadas de anidación y nacimiento de tortugas marinas. No es extraño que aves, armadillos, guecos y otras especies animales se hagan presentes de vez en cuando en los propios campamentos. Este invierno, hay constantes arribazones de tortugas negras que acuden a anidar a la playa de Colola y en contraste, hay nacimientos de tortugas golfinas diariamente, tanto de día como de noche, en la playa de Ixtapilla. Ambos sitios cuentan con campamentos de conservación donde grupos de voluntarios ofrecen al visitante información sobre la maravilla natural que ahí tiene lugar. Para pasear en lancha, lo mejor es hacerlo en alguno de los esteros de la región. Son ecosistemas en donde un brazo de mar se introduce a tierra y alimenta manglares que en su espesura forman túneles y alojan infinidad de especies acuáticas, aves y reptiles como el cocodrilo. De acuerdo con las estadísticas de quienes atienden el parador de La Ticla, sus principales clientes cada año provienen de Australia y Canadá, en cuanto al turismo externo, y de Aguascalientes y Jalisco, en cuanto al turismo interno. Cada día son más quienes buscan el contacto con la naturaleza con el fin de divertirse, descansar, conocer culturas y tradiciones, o simplemente convivir con los ecosistemas.