Lázaro Cárdenas, Mich.- Cerrar los accesos a la las barras donde se han generado los ataques a paseantes, el último este domingo, no representa ninguna solución de fondo al problema. Luis Antonio Valdovinos Jacobo, Jefe de Departamento de Ecología Municipal dijo que entodo0 caso lo que se tiene que hacer es crear una conciencia ecológica en la comunidad y replantear el funcionamiento del área. Dijo que los hechos, que resultan ser cíclicos se ha planteado el cierre del área pero hay un programa de restauración integral del Ecosistema Costero de la laguna del Caimán y en ese sentido va impreso el trabajo también con estos animales. En lo que va del año van siete ataques de cocodrilos; tres en Mata de Carrizo, dos en Barra de Santana, y dos más en el Rio Balsas. Dos víctimas fueron fatales, la de un menor de siete años en Barra de Santana ocurrido en Mayo y en el mismo lugar otro menor de once años el domingo pasado. Somos nosotros, el que invade el hábitat de los cocodrilos y obviamente con algunas consecuencias. La gente sigue confiándose, sigue pensando que estos animales comen sólo lo que le avientan, creen que son lentos y no es así. El programa de restauración incluye el aprovechamiento y monitoreo de la población de saurios, explicó Valdovinos Jacobo, así como seguimiento a la migración de estos animales y sus condiciones de vida. La aparición de los cocodrilos en el mar, canales y lugares que no son su hábitat natural, es porque el ser humano se lleve a pequeñas crías como "mascotas" cuando están pequeñas y después sean liberadas cuando son grandes y otra la migración natural de los animales. Uno de los principales problemas que hay en la Laguna Costera es la definición del hábitat porque entre ellos se da la migración constante en búsqueda de nuevos espacios y durante esa migración se pueden dar los encuentros y los ataques. Hay que enfocarse crear consciencia ecológica, enseñar a la gente a convivir con estos animales sin exponerse y redefinir estrategias para el lugar.
La Voz de Michoacán
