Notimex/La Voz de Michoacán Aguililla, Michoacán. Los hechos violentos ocurridos en la Tierra Caliente de Michoacán dejaron sin gasolina, bancos, escuelas y hospitales a municipios de la zona, pues los prestadores de servicios prefieren no entrar a esos lugares por la inseguridad. En el municipio de Aguililla, la estación de gasolina más cercana se encuentra a 40 kilómetros de distancia sobre la carretera que lleva a Apatzingán. A pesar de que la localidad cuenta con una gasolinera de Petróleos Mexicanos (Pemex) no brindan servicio ahí, luego de que en marzo de 2018 grupos del crimen organizado quemaran una pipa con 20 mil litros en la misma vialidad. Por ello, pobladores revenden el combustible de manera ilegal en camionetas y locales ubicados en la entrada de Aguililla, pues los habitantes gastan menos que recorrer 45 minutos para abastecerse, ya que en estos puntos el litro lo venden entre 23 y 25 pesos. El combustible lo almacenan en tambos de 250 litros, contenedores de mil litros y hasta en botellas desechables de refresco de tres litros. No nos la quieren traer hasta acá, una ocasión quemaron una pipa de gasolina y ya la gente le dio miedo traer, la más cercana está a la entrada del pueblo y es la única que tenemos aquí. Yo la traigo en tambos me traigo unos seis a la semana, allá la compró en 19.85”, declaró el señor Jesús, residente de Aguililla, en entrevista con Notimex. Comentó que en el pueblo hay al menos 10 personas que se dedican a la reventa de combustible y que hasta el momento ninguna autoridad se los ha prohibido. Hasta ahorita no hemos tenido problemas ni con la ley ni con la gente, no nos han dicho nada, tratamos de traer todo en orden, las notas que nos dan las gasolineras, gracias a Dios no hemos tenido ningún accidente tampoco”, aseguró. Además de los conductores, sus clientes más recurrentes son los productores de aguacate, quienes compran entre 20 y 30 litros a la semana para utilizar sus bombas de riego. De igual forma, otra comerciante de gasolina, quien se identificó como Liliana, comentó que desde hace seis meses junto con su esposo decidieron revender gasolina, debido a que en el municipio no existen fuentes de empleo. Antes nos dedicábamos al comercio pero como aquí no hay banco, no hay gasolina, no hay hospital toda la gente se está yendo”, aseguró. En la cabecera municipal de Aguililla sólo hay un pequeño centro de salud, existe un solo cajero automático en el Palacio Municipal y el único hotel que había fue quemado por los delincuentes. En las comunidades del municipio como El Aguaje, El Charapo y El Limoncito las escuelas funcionan de manera intermitente, pues los maestros no quieren ir a impartir clases por la disputa que existe entre grupos criminales por la zona. Asimismo, el municipio de Agulilla sólo cuenta con tres policías municipales. Apenas el pasado lunes policías estatales fueron emboscados por sujetos armados, dejando un saldo de 13 elementos muertos. Sí me gustaría que haya más servicios pero la seguridad más que nada, si está preocupante; para estar viviendo así da miedo, más a uno que se la pasa en el camino saliendo aquí en el peligro”, expresó Liliana.