¿Morena pone las barbas a remojar? Tras derrota en Coahuila e Hidalgo, en Michoacán analizan alianzas

Jorge Manzo / La Voz de Michoacán

Morelia, Michoacán. “Una enorme lección para Morena”, “Nosotros (en Michoacán) sí estamos trabajando”, “Es inminente y necesaria una alianza entre partidos para el 2021”, “Se debe dejar atrás la conflictividad interna”, “Yo espero que de esto se aprenda muy bien”, “Ni la necedad ni la soberbia ayudan”, entre otras más, fueron las reflexiones que dejaron plasmadas ocho voces consultadas por La Voz de Michoacán, a raíz de la contundente victoria del PRI en los estados de Hidalgo y Coahuila, en donde dejaron al partido en el poder como una segunda fuerza, y de cara a la gran elección del 2021.

“No es una situación aislada y lo que ocurrió este fin de semana debe analizarse a fondo. Hay varios factores que influyeron y tienen que ver con que Morena vive una situación de conflicto por la dirigencia, y hay una necedad de no hacer alianzas”, dijo el diputado Carlos Torres Piña, tras admitir que esto debe entenderse como jalón de orejas para las dirigencias a fin de que se coordinen de verdad. Él cree que debe darse un pacto entre los partidos Verde Ecologista y del Trabajo, pero principalmente se debe dejar a un lado la soberbia y la necedad, pues “ahí están las consecuencias”.

El aspirante a gobernador fue claro: la elección del 2021 no será mediática, sino de estructuras, y está seguro que los resultados del fin de semana no le pegarán al estado, una vez que cada entidad tiene sus rasgos. Manifestó que él está preparando a su equipo para la elección constitucional, y desafió que, si deciden hacer una votación para seleccionar al abanderado, él tiene las condiciones para un resultado contundente frente a sus opositores. Llamó a evitar las fricciones y pleitos internos, pero anticipó que la competencia estará reñida, aunque ve lejana la alianza PRD-PRI.

Selene Vázquez confesó que estos resultados deben ser una lección para Morena y para sus dirigencias. Propuso una reunión urgente entre los activos que aspiran políticamente por Morena a fin de analizar qué fue lo que ocurrió, y que se escuchen las voces que pueden aportar a la cuarta transformación. Consideró que los aspirantes no deben trabajar de manera individualista, pues esto sólo viene a ocasionar fricciones en los municipios. Reiteró que el efecto tricolor no pegará de ninguna manera a Michoacán, y justificó que Coahuila e Hidalgo nunca han tenido una vocación de izquierda.

La activista coincidió en que es necesario que la dirigencia se ponga a trabajar rumbo al 2021 y deje atrás las grillas y disputas internas. Lamentó que este resultado sea a causa de la ausencia de un comité nacional electo. Aprovechó para pedirle al alcalde Raúl Morón para que solicite licencia al cargo si es que tiene interés de ser candidato a gobernador, pues desde este momento no ve piso parejo aprovechando los reflectores y construyendo su candidatura. Echó por tierra las encuestas que hablan de una elección decidida, y asumió que es la mujer que tiene la fuerza y empuje.

El edil de Pátzcuaro, Víctor Báez Ceja, admitió que más allá de preocuparle el resultado que se tuvo, es una gran oportunidad para hacer un alto en el camino y de sentarse a reflexionar sobre lo que se está haciendo. “Esta elección debe tomarse como un ejemplo”, afirmó el aspirante a gobernar al estado, tras destacar que Michoacán debe encender una alerta amarilla. Urgió a que se establezca una ruta crítica para resolver los pendientes que tiene Morena, entre ellos, el nuevo dirigente nacional y los comités en los estados. Convocó también a la unidad interna.

“No podemos seguir la ruta de la confianza o soberbia, y mucho menos de que las candidaturas sean entregadas por compadrazgos, pensando que a quien se ponga al final del día se ganará. Ya quedó demostrado que eso no es cierto y estamos a tiempo de no hacer oídos sordos”, sentenció el también exdiputado federal, tras aclarar que él no busca la confrontación interna, pero sí no quiso quedarse callado. Advirtió que la gran prueba de fuego para Morena y la cuarta transformación será el 6 de julio, por lo que hizo el llamado para que no se transite por la ruta del triunfalismo.

A su vez, el senador Cristóbal Arias Solís pensó que estos resultados deben ser una llamada de atención y de alerta para Morena, y responsabilizó a sus dirigentes que desde el 2018 se la han pasado en conflictividad interna por buscar el control del partido, llevando incluso a la judicialización las decisiones internas. “Necesitamos la unidad y el fortalecimiento de la estructura, y por consiguiente necesitamos a una dirección que entienda esto, y que vea a los perfiles que sea los que tengan la mayor aceptación para las candidaturas, con una alta competitividad”, planteó.

El aspirante que se asume como puntero en las encuestas aclaró que Morena no se puede dar el lujo de poner a cualquier persona pensando que en el 2021 ocurrirá lo mismo que en el 2018. Resaltó que de las 15 gubernaturas que están en disputa, por lo menos 10, entre ellas Michoacán, serán ganadas por el partido fundado por Andrés Manuel López Obrador, sin embargo, para conseguir esos resultados se debe trabajar en unidad y con organización. Ironizó que el PRI está derrotado en el país y en Michoacán y aunque vayan juntos “no le podrán a Morena”.

El abogado Víctor Serrato solicitó en que hoy más que nunca es fundamental para Morena que se establezca una alianza partidista con el PT y el Verde Ecologista, e incluso fue más allá: “un perfil como el mío es el que podría generar esas coincidencias entre las fuerzas políticas”. Recordó que el PVEM lo invitó a ser su candidato cuando despachaba como presidente de la Comisión Estatal de los Derechos Humanos y el Partido del Trabajo no lo ve mal como prospecto. Aclaró que lo ocurrido en Coahuila e Hidalgo no impactará en los ánimos en Michoacán, pues son circunstancias distintas.

“Eran esperados los resultados del fin de semana porque ambos estados son bastiones del PRI desde hace más de 30 años. Se apoyan y se cuidan entre gobernadores (salientes y entrantes)”, afirmó el especialista en derechos humanos, tras expresar que estos resultados vendrán a acelerar los temas urgentes en Morena, como tener a un dirigente nacional. Se lanzó en contra de Alfonso Ramírez y acusó de hacer un pésimo papel, poniendo en riesgo todas las candidaturas y estructuras. Espera que durante los próximos días haya nuevo dirigente nacional que reconduzca los destinos de Morena.

El diputado local Alfredo Ramírez Bedolla aclaró que el ánimo se mantiene intacto, y opinó que el PRI está tratando de venderse como partido ganador, a pesar de que esos estados históricamente han sido controlados por ellos. Advirtió que estos resultados de ninguna manera se replicarán y afirmó que no sólo porque esos estados no tienen ningún parecido con Michoacán, sino porque la participación ciudadana será mucho mayor a la que se tuvo, y que no supera al 40 por ciento. Destacó que llama la atención que se le haya dejado la operación libre de operar a esos gobernadores.

Insistió que Morena en Michoacán debe consolidar la alianza con los partidos Verde Ecologista y del Trabajo, con quienes se trabaja en conjunto a nivel nacional y que están en la ruta de la cuarta transformación. Esto ayudará a que se perfile el triunfo en el 2021, proyectó, tras mencionar que será importante aterrizar una estrategia política y de respaldo ciudadano. Llamó al Instituto Electoral para que no se repita lo de Hidalgo en donde no se tuvo un Programa de Resultados Electorales Preliminares. “Aún tienen tiempo para que no haya estas anomalías que se prestan a la suspicacia”.

El superdelegado Roberto Pantoja Arzola en lugar de desánimo ve un buen mensaje para quienes están al frente del partido en todo el país, y exhortó a que se realice una reflexión al interior, con autocrítica. Resaltó que es importante que se dejen de lado las pugnas internas, y que se trabaje más con las estructuras, pues esa fue la fórmula que permitió a ese movimiento en 2018 llevarse “el carro completo”. Minimizó los resultados al tratarse de dos estados “feudos del PRI” y era evidente que habría resultados en ese sentido, aparte de que hubo una participación electoral del 40 por ciento.

El también exdirigente de Morena en Michoacán y aspirante a gobernar el estado destacó que en esta elección de Hidalgo y Coahuila no hubo la intervención ni del presidente López Obrador ni de la estructura del gobierno, lo que no ocurría en años, pues esa era una tradición. Subrayó que ni en la definición de los candidatos hubo una intervención del Estado. Adelantó que estos resultados no impactarán de ninguna manera en Michoacán, pero para que eso ocurra tienen que trabajar unidos. Ve otras circunstancias para el 2021.

Asimismo, el exdirigente estatal Sergio Pimentel Mendoza aclaró que en Michoacán Morena sí está trabajando, partiendo de una organización interna y operación política, aunque también sentenció que cada entidad vive circunstancias diferentes. Recordó que este estado tiene raíces de izquierda, y aunque no se pronunció triunfalista, se comprometió a que la derrota del partido del presidente no se replique en este estado. “Estamos trabajando como si fuéramos perder, no como si fuéramos a ganar, y con esto te digo que estamos haciendo las cosas diferentes”.

El exdelegado nacional de Morena reconoció que lo que se vivió el fin de semana es una lección para todos, aunque recalcó que el panorama no es tan negativo y todo dependerá desde el punto que se vea. Reclamó que se siga pensando que el efecto López Obrador “todo poderoso y cuasi divino” siga penetrando en la sociedad, pero planteó que así no se ganan las elecciones, sino con trabajo y organización. Recordó que la oposición quiere ver a Morena en la lona, pero estos resultados le dan espacio al partido en esos estados, en donde no se tenía.

En general, los ocho liderazgos consultados por La Voz de Michoacán reconocen que las alianzas con los partidos Verde Ecologista y del Trabajo, no debe ser desechada. Plantean que haya unidad y eviten las descalificaciones, caminando con un mismo rumbo. Urgen a que la designación del dirigente nacional ponga fin a la ausencia de un comité legalmente constituido, con quien se pueda comenzar a trazar una ruta de trabajo y se comiencen a realizar acuerdos que permitan construir sin “un fantasma” como ocurrió en Coahuila e Hidalgo en donde no hay líderes locales.