Redacción web / La Voz de Michoacán. La Dirección de Atención Física y Psicológica de la Secretaría de Seguridad Pública, a través de su programas enfocados en la mejora de la salud, ha atendido a aproximadamente 2 mil 960 trabajadores, tanto operativos y administrativos, con el fin de fortalecer cuerpo y mente en cada uno de ellos. El objetivo es que los elementos de la Secretaría de Seguridad Pública estén capacitados para su desempeño laboral y social, ello por instrucción del General Brigadier D. E. M. Alberto Reyes Vaca, quien ha encomendado a la DAFP a especializar al personal de la dependencia en materia de ejercicios aeróbicos, complementado su bienestar con el programa de nutrición. En ese sentido, el titular de Atención Física y Psicológica, Manuel Herrera Calderón, manifestó que con esto se fortalece el corazón y se trabaja en la detección oportuna de enfermedades crónicas degenerativas en los trabajadores de la SSP, así como para identificar el riesgo de enfermedades cardiovasculares en ellos. Para esto, señaló que primeramente se realiza una evaluación nutricional mediante los indicadores dietético y antropométrico y posteriormente se determina peso óseo, masa muscular, masa grasa, peso visceral, grasa visceral y peso agua. Al respecto, el funcionario detalló que de enero a la fecha, un total de 1 mil 710 elementos han mejorado su rendimiento físico atlético, siendo más competentes en su servicio del orden público. Asimismo, dijo que nutricionalmente se ha brindado atención a 750 elementos de la Policía Estatal Preventiva y a un promedio de 500 pacientes entre administrativos y familiares, a quienes se consultó y orientó en la corrección de hábitos alimenticios y dietas específicas, como en la prevención de padecimientos resultado de la obesidad y el sobrepeso. Esto, en respuesta al señalamiento del secretario de Seguridad Pública, Alberto Reyes Vaca, quien asegura que con estos renovados elementos preventivos y de custodia, encargados de hacer cumplir la ley y el orden público, se obtendrá una mejor respuesta en la efectividad de sus deberes que les impone la ley, sirviendo a su comunidad y protegiendo a todas las personas contra actos ilegales y en consonancia con el alto grado de responsabilidad exigido por su profesión.