Arturo Molina / La Voz de Michoacán Morelia, Michoacán. Ante la falta de denuncias por delitos de extorsión, incluyendo las telefónicas, y a la falta de cifras que permitan conocer la incidencia real de este delito, la Fiscalía General del Estado (FGE) de Michoacán buscará que el Poder Legislativo pueda robustecer la capacidad de actuación de la institución en este tipo de delitos. Actualmente, la Fiscalía no puede actuar de oficio en un delito que sigue afectando a miles de michoacanos todos los años. Las cifras no coinciden con la realidad. Desde semanas atrás, productores michoacanos denunciaron ante medios de comunicación haber sido víctimas de cobro de piso, extorsiones para pagar al crimen organización y hasta secuestros de quienes se reusaron a pagar este recurso. Advirtieron que no confían en las instituciones municipales o regionales para presentar denuncias. Al respecto, la Fiscalía Estatal ha referido no contar con denuncias que les permitan actuar, por lo que, destacaron, debe ser una de las prioridades legislativas en cuanto a la persecución de los delitos en términos legales. El fiscal Adrián López Solís reconoció que, sin una denuncia, sin la información necesaria, no se pueden solicitar órdenes judiciales ni mucho menos sustentar carpetas ante un juez. El Secretariado Ejecutivo del Sistema Nacional de Seguridad Pública (SESNSP) muestra una diferencia similar, con un promedio de 40 a 50 denuncias anuales, muy alejada de la realidad de un estado en donde se reportan diariamente en la nota roja varios de estos episodios. Preocupa que actualmente el delito de extorsión ni siquiera se considera como delito grave, por lo que en caso de que se registre alguna detención derivada por denuncia, el inculpado saldría libre en cuestión de horas y lo anterior podría representar repercusiones para los denunciantes. “El Congreso tiene mucho que hacer en su legislar; lo que tiene que ver con delitos para que puedan ser acreedores a prevención preventiva es toda una discusión en el marco del nuevo sistema de justicia penal”, dijo Adrián López. “Donde debería robustecer la capacidad de la autoridad es en el delito de extorsión, que no amerita prisión preventiva oficiosa y tenemos una altísima cifra negra porque no tenemos denuncia porque la gente tiene temor y sí hay indicios de que esto se está produciendo en sectores productivos de la sociedad”, manifestó el titular de la FGE. Existen diferentes tipos de extorsión; si bien aquella relacionada al crimen organizado es la que ocupa los principales reflectores, prácticamente todos los días miles de personas son víctimas de intentos de extorsión vía telefónica o en redes sociales. Desde la llamada sobre un falso secuestro, amenazas de muerte a cambio de un depósito telefónico o la llamada del pariente migrante que requiere que se le depositen miles de pesos para poder ingresar al país son la constante y de los cuales, si bien la mayoría de los ciudadanos no le dan importancia, todavía representan un riesgo por la cantidad de tatos personales que siguen siendo entregados a grupos delincuenciales. “La primera herramienta es la noticia que se produce a través de una denuncia, no podemos iniciar carpetas de investigación si no tenemos denuncia sólida que nos permita armar un caso. Si llegamos sin los suficientes datos nos niegan la orden, a la hora de pedir la vinculación no nos podemos fortalecer en el juicio que quienes sean víctimas tienen que denunciar”, refirió el fiscal del estado. Al respecto, autoridades y especialista señalan que recibe un acto de extorsión es ya una llamada telefónica que intenta confundir o presionar para obtener dinero u otro beneficio. ¿Cuándo soy víctima de extorsión? Una persona es víctima de extorsión: Si le hacen creer que es un familiar en peligro (fingiendo voz de angustia)Un servidor público o cualquier persona ajena que lo amenaza directamenteLo amenazan con el secuestro de algún familiarLe ofrecen ayuda para salir de un problema legal Le hacen creer que es beneficiario de un sorteo o rifaEs amenazado con la difamación pública o con sufrir dañosLe exigen un depósito en cuentas bancarias, órdenes de pago o compra de tarjetas telefónica.