Redacción / La Voz de Michoacán Morelia, Michoacán.- En la última temporada de fiestas decembrinas, los accidentes por quemaduras incrementaron hasta en un 300 por ciento en el Estado de Michoacán, según datos de Protección Civil. El uso indiscriminado de pirotecnia, fogatas, fogones y otras actividades típicas de la temporada derivaron en un incremento en el riesgo. En los últimos años la venta de artefactos explosivos incrementó casi de manera exponencial. Tianguis, mercados, mesitas de "cuetitos" en las avenidas principales e incluso en las tiendas son la constante en ciudades como Morelia. Por lo anterior la Secretaría de Salud de Michoacán (SSM), exhortó a madres y padres de familia a tomar conciencia sobre el riesgo que conlleva que los menores de edad jueguen con pirotecnia. Esto por las próximas festividades decembrinas, donde esta práctica se vuelve común entre las niñas, niños y jóvenes, principalmente, y la atención del área de urgencias en el Hospital Infantil Eva Sámano de López Mateos, por quemaduras por manipulación de cuetes, incrementa. Para ello, busca crear conciencia en madres y padres de familia para que no fomenten en sus hijos el uso de pirotecnia, ya que no es un juguete, sino un peligro que pone en riesgo el bienestar del menor. Tan solo en 2022 se atendieron en todo el estado 140 menores de 10 a 14 años por diversos tipos de quemaduras. La pólvora con los que son realizados estos artefactos, provoca graves accidentes al dejarlos al sol o fuentes de calor dentro de un comercio o vivienda, ya que se ocasionan incendios, situación que puede evitarse al no venderlos y no comprarlos. Además, de que pueden provocar daños en la audición al tronarse, quemaduras por guardarlos en los bolsillos, por eso, siempre es importante supervisar a los menores durante su manipulación, evitar acercar a la boca para no intoxicarse, lavarse las manos después de tener contacto con ellos. La gravedad de las lesiones que provoca en el cuerpo humano son tales, que provoca mutilaciones permanentes, es además una de las principales causas de incendios, quemaduras, problemas auditivos, daños oculares, entre otros.