Redacción / La Voz de Michoacán Morelia, Michoacán. El cadáver de un hombre que fue lapidado yacía en una brecha del Ejido de San Antonio Parangare, ubicado en este municipio de Morelia, a donde se trasladaron las autoridades investigadoras para realizar las diligencias respectivas con la finalidad de esclarecer el asunto. Al respecto, se supo que unos vecinos del lugar hallaron al difunto en las condiciones antes mencionadas y avisaron de inmediato al jefe de Tenencia, mismo que reportó a la Policía lo sucedido. Los representantes de la ley llegaron al lugar y al confirmar la situación acordonaron el sitio para evitar la contaminación de los indicios. Los encargados de resguardar el perímetro fueron los agentes de la Policía de Morelia, mismos que pidieron la ayuda de los expertos de la Fiscalía General del Estado de Michoacán. Minutos después arribó el personal de la Unidad de Servicios Periciales y Escena del Crimen para encargarse de las indagatorias sobre el homicidio. Voces policiacas dijeron que el ahora occiso está en calidad de desconocido, es de entre 30 y 35 años de edad, de piel morena y de complexión media; vestía un pantalón de mezclilla de color azul, una playera negra y calzado de color café. El acontecimiento fue en las inmediaciones de la carretera que conecta con la población de San Nicolás Obispo, al poniente de esta capital michoacana.