El Universal /La Voz de Michoacán Sigifredo García Morales, El Sigi-Sigi, sicario de Felipe de Jesús Pérez Luna, El Ojos, capo abatido en Tláhuac, recibió la mañana del martes el auto de formal prisión y seguirá preso en el Reclusorio Oriente acusado de asesinar a un ex comandante de la procuraduría del Estado de México el año pasado aparentemente porque la víctima se negó a brindar protección a la célula criminal a la que pertenecía. La procuraduría capitalina informó que logró acreditar su participación en el evento, por lo que el juez 26 penal inició un procedimiento ordinario en su contra. Por esta misma investigación fue detenido Miguel Ángel Pérez Ramírez, El Mickey, hijo de El Ojos y quien está recluido en la zona conocida como el “Diamante” porque se le considera peligroso. El Sigi-Sigi fue arrestado por agentes de investigación de la procuraduría local en La Conchita; además del homicidio, se le liga con narcomenudeo en Tláhuac, Xochimilco y Coyoacán; los informes detallan que participó en el enfrentamiento contra la Marina el día en que El Ojos fue abatido. El día de los hechos, él junto con Carlos Alejandro Mendoza Sandoval, El Cindy, cuñado de El Ojos, y otro integrante de esta banda criminal, El Cholo, lograron escapar gracias al muro que Felipe de Jesús y tres de sus sicarios hicieron al enfrentar a las fuerzas federales; el líder de esta agrupación criminal buscaba que su legado siguiera en pie aunque muriera en el lugar. El Sigi-Sigi era conocido también por presumir en sus redes sociales fotografías con Miguel Ángel Pérez Ramírez, El Mickey, armas de grueso calibre, la droga que vendía, las ganancias que ésto le generaba, así como la vida ostentosa que gracias a la actividad delincuencial tenía. Las autoridades lo tenían catalogado como “de alto riesgo”, pues era uno de los más peligrosos en la agrupación.