Morelia, Michoacán. En Michoacán la historia del desplazamiento obligado de personas a consecuencia de la violencia o presencia de grupos delictivos, debe evitarse a través de la efectiva aplicación de políticas públicas, encaminadas a resolver el tema de la violencia desde sus causas y por ello se deben de fortalecer las acciones de justicia social, afirmó el presidente de la Comisión de Seguridad y Protección Civil en el Congreso del Estado, Wilfrido Lázaro Medina, en el marco del Día Mundial de los Refugiados que se conmemora este 20 de junio. Señaló que estos casos son solo los que están registrados formalmente, pero seguramente han sido muchas más las familias que han tenido que dejar su hogar en busca de seguridad. El diputado del PRI, precisó que datos de la Comisión Nacional de Derechos Humanos, estiman que en Michoacán han sido desplazadas a causa de la violencia y la presencia de grupos delincuenciales cerca de 791 personas, esto durante el periodo comprendido entre 2013 al 2015. Estas personas, informó, eran principalmente de los municipios Aquila, Aguililla, Múgica, Apatzingán y Tepalcatepec, según el informe que Especial sobre desplazamiento forzado, entregado al Congreso del Estado, aunque el Legislador aseguró que deben de existir muchas más familias desplazadas de forma extraoficial por el tema de la inseguridad. Michoacán recordó, ha sido una de las entidades que han sido más vulneradas y lastimadas por la delincuencia, pero esta historia debe ser atacada desde su causas y llamó a la sensibilidad de gobiernos municipales, del estado y ciudadanos, ante un escenario adverso en diversas partes del mundo, donde el desplazamiento de cientos de familias orilladas por diversas causas, como son los conflictos bélicos o la violencia, es una lamentable realidad que exige acciones conjuntas, para proteger a los niños y jóvenes de tanta violencia. Wilfrido Lázaro Medina agregó que la grave crisis de personas desplazadas de sus países de origen a nivel mundial, demanda acciones conducentes de cada uno desde su trinchera, por un lado generar leyes que contribuyan a aminorar la difícil situación que enfrentan, y por otro evitar acciones discriminatorias y que en toda política pública se ponga en el centro, la dignidad de las personas.