Piratas informáticos subieron presuntamente en Internet datos de los usuarios del portal de contactos Ashley Madison, una web para personas que buscan una relación extramatrimonial. Según informan entre otros la revista "Wired" , el archivo robado hace en torno a un mes contiene 9,7 gigabites y está disponible en la "darknet" a través del software Tor, que permite comunicarse de forma anónima. El archivo contiene al parecer datos de los perfiles de unos 32 millones de usuarios, entre ellos los nombres, direcciones, números de teléfono y contraseñas encriptadas. La compañía, con sede en Canadá y activa desde 2001, señaló en un comunicado que están investigando lo ocurrido y trabajando en comprobar la autenticidad de los datos y eliminar las informaciones publicadas ilegalmente. Entre quienes dudan de que los datos colgados sean auténticos figura el ex jefe técnico de Ashley Madison, Raja Bhatia, quien desde el robo de información trabaja como asesor de la compañía. "Vemos cada día entre 30 y 80 supuestas publicaciones" , dijo al experto en seguridad informática Brian Krebs, quien en julio informó sobre el hackeo. Según Bhatia, la mayoría de esos datos publicados proviene de otras fuentes. Graham Cluley, también experto en seguridad informática, subrayó en su blog que aunque los datos fueran auténticos tampoco se podrían sacar conclusiones, pues Ashley Madison no pide respuesta de confirmación tras recibir una dirección de correo electrónico. De este modo, en la base de datos podrían aparecer nombres de personas que jamás tuvieron nada que ver con la compañía de contactos. Según señala en su blog el investigador Robert Graham, el archivo contiene datos de unos 28 millones de hombres y cinco millones de mujeres, con información que incluye también características como el peso o la altura. Además, añade que muchos perfiles se realizan con datos falsos con la intención de llamar la atención sobre la web y sostiene que los datos sobre las tarjetas de crédito hacen referencia a transacciones, no a los números de éstas. El periodista Sam Biddle, del portal "Gawker" , contó al respecto en su Twitter que encontró en los datos publicados un perfil que él mismo creó para documentarse cuando preparaba un artículo sobre citas a través de Internet.