Agencias / La Voz de MichoacánMéxico. Un día eres joven y tienes lindos lunares en tu cuello y al otro día te das cuenta de que los acompañan unas cuantas verrugas, pequeñitas y asintomáticas, pero están allí estorbando incomodando y rozando con tu ropa o accesorios. Comienzan las preocupaciones, las angustias por si son tumores malignos, o porque son un síntoma de alguna otra enfermedad, pues la buena noticia es que son benignos y muy frecuentes, tal como explica la doctora Ana Paula Sedano, médico dermatólogo de la ciudad de Guadalajara, México. “Los fibromas laxos son tumores benignos de la piel y la gente suele llamarlas “verrugas”. Suelen aparecer en zonas de pliegues o fricción como en el cuello, párpados, axilas e ingles, aunque también pueden aparecer el todo el cuerpo. Pueden aparecer por factores hereditarios o por enfermedades metabólicas como diabetes, hipertensión y obesidad, entre otras”. La especialista especifica que estos fibromas -o verrugas como todos los llamamos- suelen ser pequeños y asintomáticos, pero además no requieren un tratamiento a menos que estén en algún punto molesto porque pueden inflamarse por el roce o por razones estéticas. Las verrugas son fácilmente identificables, suelen ser del mismo color de nuestra piel o de color pardusco, son blandas y pueden ser múltiples. Suelen aparecer a partir de los 30 años de edad pero se multiplican y se hacen más grandes con la edad por los cambios hormonales. Además, es importante destacar que no son contagiosas. Muy bien. Todo suena sencillo, pero ¿qué hacer cuando descubres que lo que destaca en tu cuello es una verruga sobresaliente y no un collar? Primero que nada, tranquilizarse pues incluso hay ocasiones en que desaparecen solas entre dos y seis meses después de su aparición. La doctora Sedano explica que son muy fáciles de distinguir, y que solamente se les practica una biopsia si tienen características que las hacen sospechosas. Por otra parte, la doctora Nadia Merino, en un artículo publicado en el blog Quironsalud de España, explica que la aparición de verrugas puede tener relación con una predisposición genética y que es importante que las diagnostique un dermatólogo porque se pueden confundir con otras lesiones cutáneas similares que no deben recibir la misma consideración ni tratamiento. Aunque, como ya se mencionó, las verrugas comunes son asintomáticas y no requieren ningún tratamiento, según la Clínica Mayo, hay algunos signos de alarma que nos deben llevar de inmediato al especialista: crecimientos dolorosos o cambian de aspecto o color; has intentado tratarlas pero persisten o se diseminan. Su crecimiento es molesto e interfieren con tus actividades; no se tiene seguridad de que sean verrugas o aparecen muchas, pues esto puede indicar alguna deficiencia en el sistema inmune. Al querer eliminarlas por asuntos estéticos o porque el roce se hace incómodo, Sedano recomienda hacerlo de manera segura con electrocauterio, ácido salicílico, nitrógeno o bisturí, pero todos estos procedimientos debe hacerlos un profesional. Al tratar de extirparlas cortándolas, limándolas o arrancándolas con un hilo -sí, hay gente capaz de hacer esto- podemos causar cicatrices, infecciones graves y generar mucho dolor. ¿Y la receta de la abuela? Aunque se recomienda retirarlas por especialistas y es necesario obtener un diagnóstico profesional, las recetas caseras para ayudar a eliminar las verruguitas de este tipo existen desde hace mucho tiempo. Antes de aplicar o preparar cualquier tónico casero hay que insistir en primer lugar en la pulcritud y limpieza y en siempre ser cuidadosos con la protección solar, y con evitar la aparición de manchas en la piel. Entre los remedios clásicos caseros para combatir las verrugas comunes en el cuello está el vinagre de manzana, ese líquido que se ha convertido en un imprescindible de la salud para muchos, también se usa como tónico sobre las pequeñas verrugas. (Getty Creative) En el portal Salud180, aseguran que las propiedades antivirales y antibacterianas de este ingrediente son favorables para eliminar las frágiles pero molestas verrugas. Solo basta con aplicarlo en la verruga con una mota de algodón como si de un tónico se tratara. Se deja actuar toda la noche vendado y se enjuaga al día siguiente. Se repite cada tres días. Otro ingrediente casero recomendado es el ajo, pues al consumirlo crudo ayudamos a fortalecer el sistema inmune y en consecuencia se combaten las verrugas, cuya aparición también esta relacionada con el virus de papiloma humano (VPH). (Getty Creative) Finalmente, el ingrediente de mayor tradición para eliminar las verrugas es la cebolla, hortaliza a la cual se le adjudican propiedades antibacterianas y antifúngicas, y aunque no existen pruebas científicas de su eficacia en este caso, se recomienda consumir tres cucharadas diarias del zumo y también aplicarlo como un tónico cada noche. Asimismo, el portal especializado Mejor con Salud, coincide en un artículo verificado por la nutricionista Elisa Morales Lupayante, donde se recomienda también colocar media cebolla blanca o morada en la zona afectada durante un rato y repetir diariamente. En todo caso, aunque la sabiduría popular es ancestral, y siempre genera una sensación de confort hogareño, lo más recomendable siempre es consultar al especialista antes de recurrir a cualquier procedimiento.