Paola Franco/ La Voz de Michaocán Morelia, Michoacán. Las buenas noticias llegaron para el estado con la disminución de pobreza en los últimos 10 años, sin embargo, hay una "piedra en el zapato" que muestra que aún hay un rostro de notoria carencia en Michoacán, y son los "pobres" salarios que prevalecen en la entidad. Aunque en la mayoría de los rubros que toma en cuenta el Consejo Nacional de la Evaluación de la Política de Desarrollo Social (Coneval) para medir la pobreza, Michoacán tuvo una mejora, en el tema de pobreza por ingreso, por el contrario, hubo un aumento en cantidad y en porcentaje. Mientras que en 2008, 109 mil 600 personas estaban en condición de pobreza por sus ingresos, para el 2018 ya sumaban 228 mil 700 habitantes. En cuanto a porcentaje se pasó de 2.5 a 4.9 por ciento de la población michoacana en el estatus de pobreza por ingresos. También puedes leer: Bajan cifras de pobreza en México y Michoacán, pero siguen las carencias por ingresos y alimentación Esta situación también se ve a nivel nacional. Aunque en términos generales disminuyó la pobreza y la pobreza extrema en México, en los últimos 10 años, la pobreza por ingresos, alimentación y seguridad social persiste. Al menos una carencia social tienen 3 millones 796 mil michoacanos y un millón 062 mil michoacanos tienen al menos tres carencias sociales, entre las que se puede encontrar salud, vivienda, alimentación, educación y servicios básicos. Michoacán, en la informalidad Una realidad que empalma con el reciente reporte del Coneval es la estadística sobre el empleo informal en Michoacán. Siete de cada 10 michoacanos se dedica al sector informal, en empresas o actividades que no están debidamente constituidas y por lo cual no pagan impuestos, pero, sobre todo, no tienen acceso a seguridad social ni prestaciones de ley, revela la última Encuesta Nacional de Ocupación y Empleo (2019), elaborada por el INEGI. También puedes leer: Una barda divide la pobreza y la riqueza en Morelia (video) Michoacán se encuentra en el séptimo lugar a nivel nacional, por la informalidad laboral, sólo es superado por Oaxaca, Guerrero, Chiapas, Hidalgo, Puebla y Tlaxcala. Mientras que el índice de precariedad en el trabajo, es decir la constante degradación en las condiciones laborales, llega al 52%, frente al 38% de promedio en México. Otra problemática inherente al empleo es la subocupación, que se refiere necesidad de trabajar más tiempo, o sea, el tener una actividad complementaria o de un nuevo trabajo con mayor carga de horarios para poder sobrellevar los gastos básicos. Este sector de la población también aumentó durante el último año. El reporte del INEGI retrata que mientras en marzo de 2018, el 6% de la población económicamente activa se consideraba subocupada, este indicador aumentó al 8% para el primer trimestre de este 2019. Es importante señalar que, en la estadística de empleo en Michoacán, la mayoría son casos de hombres de entre 30 y 49 años y el grueso de este sector es padre. Se ocupan principalmente en las áreas de servicios y comercio, y en seguida agricultura y ganadería, aprovechamiento forestal, educación y comercio al por mayor. Morelia no se escapa: Caso Nieves Aunque sea la ciudad más grande el estado, Morelia no se escapa a la pobreza y por el contrario alberga zonas donde la marginación es parte del crudo paisaje michoacano. Uno de los trabajos de esta casa editorial dejó ver, como uno de los ejemplos, lo que ocurre en la comunidad Nieves, a donde acudió el periodista Arturo Molina. En la población enclavada al Sur de Morelia, se tiene que caminar kilómetros completos para conseguir solo un poco de agua, cuya calidad pone en riesgo a la salud de la población. También puedes leer: El rostro de la pobreza en Morelia (video) Y es que, pese a que cuenta con grandes cantidades de agua subterránea, los pozos que se han autorizado perforar han sido todo para los monocultivos de la región. Para los habitantes se ha vuelto una situación recurrente el vivir con cortes de agua y tener que surtirse en los pocos pozos disponibles, lejanos y con un líquido que suele salir muy sucio. La denuncia de los activistas, es que los ejidatarios y la población de la comunidad, han solicitado al gobierno la perforación de nuevos pozos que doten del agua a la pequeña comunidad. No obstante, aclaran que en todas las solicitudes la negativa ha sido la constante. Viven con miedo de denunciar la arbitrariedad con la que les ha sido arrebatada el agua. Aseguran desde hace 15 años llegaron productos foráneos de aguacate, instalaron sus huertas en la región y desde entonces, todo cambió para ellos. Sin agua y amenazados de no hablar sobre el tema ante posibles represalias. Esta es una de las comunidades con los índices de marginación y pobreza más elevados de la entidad. Las buenas noticias Aunque en el tema de la pobreza por ingresos Michoacán ha ido hacia atrás, en los otros rubros sí ha avanzado, lo que permite que en términos generales se registre una reducción de pobreza. En el 2008 había 2 millones 411 mil personas en pobreza, y para el 2018, se registró esta condición en 2 millones 161 mil michoacanos, de acuerdo al Coneval. En otras palabras, en 2008 había 55.5 por ciento de habitantes de Michoacán en pobreza, y 10 años después se redujo al 46 por ciento. El periodo entre 2016 y 2018 es en donde disminuyó más la pobreza, pasando de 2 millones 565 mil personas a 2 millones 161. Combate a la pobreza extrema Mientras que en el rubro de pobreza extrema pasó de 435 mil 300 personas en dicha condición, a 284 mil 400. De los 2 millones 161 mil michoacanos en situación de pobreza en 2018, 1.877 millones de michoacanos está en situación de pobreza moderada y 284 mil 400 de michoacanos en situación de pobreza extrema. El informa también señala que un millón 634 personas son vulnerables por carencias sociales, 228 mil 700 michoacanos son vulnerables por ingresos y 670 mil 300 se reportan como población no pobre y no vulnerable.