Arturo Molina / La Voz de Michoacán Morelia, Michoacán. La falta de recursos ha impactado el desempeño de la Fiscalía General del Estado (FGE) de Michoacán y el Servicio México Forense (Semefo) en la identificación de personas desaparecidas, justificó la dependencia. Actualmente requiere de al menos 15 millones de pesos para cumplimentar el cuadro básico de pruebas de ADN y perfiles genéticos de los cientos de cuerpos que no se identifican en el estado y que llegan a la fosa común. Sobre el señalamiento de colectivos de búsquedas de personas desaparecidas de que la Fiscalía estaba incurriendo en negligencia al no integrar estos expedientes, que se consideraban de ley y necesarios para localizar a los seres queridos, el fiscal Adrián López Solís argumentó que se ha hecho lo posible al interior de la dependencia en cuanto a la elaboración de perfiles genéticos se refiere, no obstante, cada una de las pruebas tiene un costo de 3 mil 500 pesos, las cuales se tienen que repetir en al menos tres ocasiones para evitar confusiones en la información. También puedes leer: Cadáveres sin nombre: Semefo envía cuerpos a fosa común sin investigar identidad, denuncian La situación financiera que atraviesa la FGE presenta un déficit importante, por lo que no se cuenta con el recurso para esta y otras tareas que pudieran ser prioritarias al interior del ente. Actualmente, el banco de ADN de la Fiscalía General de Michoacán cuenta con más de 700 registros de personas no identificadas, no obstante, los ciudadanos que acuden a la Fiscalía a buscar s sus familias tienen que realizarse otras pruebas de ADN que también corren a cuenta de la dependencia. En voz de López Solís, en el marco de la Estrategia Nacional para la Búsqueda de Personas Desaparecidas, se solicitó a la Secretaría de Gobernación (Segob) que se dotara de mayores recursos a las fiscalías para el desarrollo de los bancos de ADN, no obstante, hasta la fecha no han tenido eco sus solicitudes. Tenemos 700 muestras para analizar el perfil genético solo de personas no identificadas. Cada que llega una persona a buscar un familiar nos llevaría a realizar el examen del familiar”, argumentó. Los colectivos señalan que estos exámenes y perfiles genéticos tendrían que estar debidamente integrados sin necesidad de una solicitud previa. “Eso implica un gasto de 15 millones de pesos que no tenemos nosotros para de un solo momento procesar todas esas muestras, forma de parte de una insuficiencia de la administración y lo planteamos desde un inicio en la Estrategia Nacional para que se apoye a la Fiscalía General del Estado con recursos para hacer estos estudios”, manifestó el fiscal de Michoacán. Apenas esta semana, mujeres pertenecientes a colectivos de personas desaparecidas, señalaron haber encontrado a un familiar en la fosa común de Morelia. La denuncia cayó en que al ahora occiso no se le practicaron las pruebas de ADN que marca la ley y fue depositado en la fosa común, cuando se habría denunciado la desaparición de la persona desde días antes. También puedes leer: Activista advierte que la situación de desaparecidos en Michoacán está «cada vez peor» Actualmente, la Ley Nacional para la Búsqueda de Personas Desaparecidas marca que las fiscalías deben de elaborar todo un perfil genético de las personas que no se identifican a la hora de ingresar a los Servicios Médicos Forenses. En el caso de Michoacán esto no se ha cumplido y la situación es compleja, dado el incremento constante en la tasa de homicidios. Sólo en lo que va de este 2019 y hasta el mes de agosto, la Fiscalía de Michoacán ha iniciado mil 100 carpetas de investigación por homicidio, las cuales han incrementado hasta en un 15 por ciento respecto al 2018, año que también fue considerado como el más violento en la historia reciente de la entidad. No se actúa de manera indebida dejando resguardada evidencia que permita la localización. Estamos ante un problema por desaparición de personas que lo estamos atendiendo porque es un mandato de la ley general, y tenemos, como lo consignó en el plan de persecución del delito, pendientes, dado que de todos los casos en donde nos identifique hay que hacer tomas del cuerpo ya hacer pruebas de ADN y hacer perfiles genéticos que se tienen que confrontar con el de las familias que los están buscando”. En lo que va del año, se han registrado cerca de 600 casos de desaparición, de las cuales poco más de la mitad han logrado ser ubicados, el resto de personas siguen siendo buscadas por autoridades y sus propios familiares, con lo que el listado de desaparecidos de los últimos 15 años sigue creciendo. Hasta este 2019, Michoacán cuenta con una larga lista de personas desaparecidas, con más de 3 mil 400 casos reportados por los colectivos y mil 269 según el registro oficial federal; la lista, lejos de reducirse aun con el trabajo de caravanas, sigue creciendo por efecto de la lucha de grupos delincuenciales. La desaparición forzada sigue siendo otra problemática latente en el estado de Michoacán. En nuestro país, las personas más vulnerables para las detenciones arbitrarias por corporaciones policiales e instancias de procuración de justicia son los jóvenes y personas en extrema pobreza, asimismo, no existe una cifra oficial sobre cuantas personas han sido afectadas por esta práctica que en muchos de los casos llegan a terminar en extorsiones o desapariciones forzadas; de ese universo de desaparecidos el 80 por ciento son hombres y el restante 20 por ciento son mujeres.