Jorge Manzo/La Voz de Michoacán Morelia, Michoacán. Las universidades Michoacana de San Nicolás de Hidalgo (UMSNH) y Autónoma Benito Juárez de Oaxaca (UABJO) son las únicas, de las siete que están en crisis en el país, que no han realizado modificaciones a su régimen de pensiones y jubilaciones, revela informe del Gobierno de la República, sin embargo, la Casa de Hidalgo es la que de plano no ha hecho nada para resolver el problema estructural. En Oaxaca en cinco años la crisis financiera hará insostenible la operatividad de su institución, aunque allá están más adelantados en los cambios estructurales sugeridos. El peor escenario no es que se agotarán los recursos para la operatividad de la institución a más tardar en el mes de octubre, quedando pendientes quincenas, primas vacacionales y aguinaldos, sino que, si la Universidad Michoacana aspira a concursar en futuras convocatorias que apoyen a la reestructuración financiera de las instituciones de Educación Superior, será necesario haber cumplido con 5 acciones que se comprometieron, de lo contrario, se cerrarán las bolsas, según la notificación que le hizo la directora general de Educación Superior Universitaria, Carmen Enedina Rodríguez Armenta, al rector Raúl Cárdenas Navarro. También puedes leer: «Se apretará el cinturón» en gastos la Universidad Michoacana La crisis en la máxima casa de estudios no sólo es por el menor subsidio por alumno que otorga el Gobierno de la República y que asciende a 54 mil 570, frente a otros estados como Tamaulipas en donde dan 128 mil 806 pesos. En el caso de la Casa de Hidalgo con el apoyo estatal la suma es de 60 mil 263 pesos. En total, por año se canalizan 2 mil 970 millones de pesos, que en estos momentos resultan insuficientes para la carga que enfrentan, aunado a que el Bachillerato sigue sin tener un reconocimiento para el otorgamiento de plazas de trabajo, sino también, uno de los más significativos es porque poco a poco el sistema de pensiones y jubilaciones asfixia las finanzas. Las contradicciones Mientras que en cualquier ocupación en México debes cumplir con 60 años de edad y un mínimo de mil 250 semanas cotizadas en el Seguro Social para poderte retirar, además de que tus remuneraciones surgirán producto de un balance que se haga de la actividad productiva reportada, en la Universidad Michoacana no hay límites: cumpliendo 25 años de trabajo, independientemente de la edad del empleado, puedes acceder al beneficio del retiro. Además, de que se les paga el 100 por ciento de su salario y no existe un fondo en donde estén captando recursos. La Universidad Michoacana realizó cinco compromisos a cambio de firmar el convenio de apoyo financiero de recursos públicos no regularizables que permitieron el cierre del 2018. En ese momento, el rector Medardo Serna González recibió un fondo de 500 millones de pesos. En aquella ocasión, los liderazgos de los sindicatos universitarios oficializaron la noticia junto con la Rectoría. Ese convenio trae plasmadas acciones, una tiene que ver con garantizar la viabilidad financiera del sistema de jubilaciones y pensiones mediante el fortalecimiento y modificación del mismo y se reporta en proceso, aunque en la realidad no se tienen avances. También puedes leer: Rector ofrece auditorías Los sindicatos de empleados y profesores afirman que los jubilados y pensionados no tienen responsabilidad alguna en la crisis financiera que golpea a la Universidad Michoacana. Ellos aseguran que las malas administraciones, comenzando desde la era de Salvador Jara Guerrero, son las que han propiciado que las finanzas estén colapsadas. Y aunque han mostrado disponibilidad de entrarle a reformar el sistema, en la realidad poco han avanzado. En Oaxaca, en donde se prendieron los focos rojos por la insostenibilidad de la universidad autónoma, el próximo año tendrán un incremento en la cantidad de jubilados alcanzando la tercera parte de los empleados en activo y cuatro años después el 50 por ciento. Hasta ahora, sólo los jubilados de los sindicatos de empleados y profesores son los que han rechazado cualquier acercamiento, no obstante, ellos no resultarán modificados de ninguna manera con la reforma que se contempla al sistema. Lo que sí ha cumplido la UMSNH El 11 de abril de este año la Secretaría de Educación Pública le notificó al rector Cárdenas Navarro los avances de los compromisos que se establecieron en 2018 para garantizar la continuidad de las clases. El documento, que está publicado en el portal de transparencia de la Universidad Michoacana, establece que una de las acciones era realizar las gestiones para que se pudiera contar con el estímulo fiscal del artículo 3-B de la Ley de Coordinación Fiscal con objeto de contribuir a disminuir el déficit financiero. Desde el 7 de marzo se recibió y se encuentra en análisis de cumplimiento por parte del Grupo Técnico. También puedes leer: Riesgo de huelga en la UMSNH También se pidió continuar con la política institucional, acordada por el Consejo Universitario, de la contención de contrataciones de personal académico sin el soporte de la partida presupuestal correspondiente, con la finalidad de disminuir el costo de la nómina de personal académico para el ciclo escolar 2018-2019, y continuar con la política de optimización del uso de la capacidad disponible, tanto de infraestructura física como de recursos humanos. El informe también está en análisis por parte del Grupo Técnico, notificó la Dirección General de Educación Superior Universitaria. Asimismo, se ha continuado con la política institucional, acordada por el Consejo Universitario, de contención de contrataciones de personal administrativo; mantener vigente el programa de retiro voluntario; mantener la reducción de los salarios y aguinaldos, a mandos medios, a partir del Subdirector Administrativo y superiores, en un 10 por ciento, además de reforzar el Programa de Austeridad Racionalidad y Eficiencia del gasto anual. Entre las acciones que se contemplan en este punto destaca mantener el gasto operativo administrativo conforme al ejercicio inmediato anterior; optimizar el consumo de combustible del parque vehicular oficial y regular los servicios de mantenimiento; consolidar el uso eficiente y racional destinado a suministros y servicios para oficina; continuar con la disminución de los trabajos de adecuación, mantenimiento y ampliación o remodelación de oficinas al mínimo y restricción del servicio de telefonía móvil. Asimismo, restricción del uso de telefonía fija comercial, priorizando el uso de telefonía por protocolo de internet; disminuir el gasto por concepto de viáticos; eliminar la adquisición de vestuario y uniformes, con la excepción a lo estipulado en los contratos y los requeridos para equipos oficiales representativos de la institución; restricción para la adquisición de cualquier tipo de bienes que no resulten necesarios para el buen desarrollo de las funciones académicas y/o administrativas. También restricción de gastos por concepto de eventos sociales por aniversario y fin de año, respetando lo estipulado en los contratos; emitir las invitaciones, carteles y cualquier otro documento análogo, de manera digital y a través de los medios de comunicación electrónica; contratación de publicidad en medios masivos al mínimo indispensable, así como la publicación de la “Gaceta Nicolaita” sólo en medio electrónico. Sin dinero en la UMSNH La Universidad Michoacana enfrenta un déficit de 996 millones de pesos. El presupuesto que le etiquetaron apenas le alcanza para cubrir las prestaciones de la primera quincena de octubre. Es decir, quedan volando cinco pagos, la prima vacacional y los aguinaldos para los más de 6 mil trabajadores, entre sindicalizados y eventuales o de confianza que tienen registrados en la nómina. En total, este año la Casa de Hidalgo tiene un presupuesto aprobado de 2 mil 726 millones de pesos. Cada año para cumplir con los pensionados y jubilados se erogan más de 900 millones de pesos. En Oaxaca, representan el 20 por ciento con respecto a la nómina de trabajadores activos. Es decir, se gastan más de 198 millones de pesos.